China, es el país conocido como «gigante milenario», aunque su nombre tradicional es Zhong guo o «país del centro», ya que se tenía la ideal de que era el país más céntrico de la tierra, desde un punto de vista geográfico, político, económico y cultural.
Aunque las fronteras han ido variando a lo largo de los siglos, su núcleo central sigue intacto, aquel sobre el que se desarrolló el nacimiento de la civilización china: la cuenca del río Huanghe, que por sus sedimentos de loes recibía la denominación de «tierra amarilla» o «país amarillo».
Podríamos hablar de innumerables detalles de este especial país, pero en este artículo nos hemos querido centrar en tres conceptos (costumbres chinas):
- El papel que ha ido teniendo la mujer en dicha civilización, con el transcurrir de los años.
- Los vestidos típicos del país y su simbología.
- Los deportes tradicionales del país chino.
La mujer
Hace muchísimos años, en las épocas históricas más antiguas de China, imperaba por aquellos lares el matriarcado: los hijos adoptaban el apellido de la madre y no el del padre. Era normal no conocer en ocasiones el nombre del padre, era un detalle sin importancia. Todo este «privilegio» acabó durante la dinastía Zhou, donde la mujer perdió sus funciones dominantes. Desde entonces, y hasta ahora, la misión de la mujer en China era el hogar familiar, y dentro de este, siempre ha tenido la máxima importancia.
Con el paso de los años, sobre todo las mujeres pudientes de las capas más altas sociales, pudieron ir desarrollando diferentes actividades alternativas más allá de las paredes del hogar:
- Durante la dinastía Tang: había mujeres que podían montar a caballo.
- Durante la dinastía Song y a principios de la dinastía Yuan, había mujeres que podían viajar solas por motivos comerciales e incluso había una monja taoísta que fue pionera de la industria del algodón.
Sin embargo, empezó la famosa práctica del vendado de los pies a las mujeres, lo cuál reducía drásticamente la actividad de estas, ya que las incapacitaba para multitud de funciones. Aunque se desconoce el motivo de origen de esta práctica se dice que era para diferenciar a las mujeres chinas de las extranjeras, ya que a estas últimas se las consideraba inferiores.
Fue gracias a la insurrección de los Taiping, que se prohibió el vendado de los pies, concediendo de esta manera más libertad a las mujeres.
Los misioneros protestantes, a finales del siglo XIX, favorecieron la introducción de las niñas a la ensañanza. Por otro lado, desde la llegada al poder del Partido Comunista, se ha esforzado por promover la igualdad entre hombres y mujeres pero sin abandonar algunas estructuras tradicionales familiares. Es por esta razón, por la que aún a día de hoy, algunas familias abandonan a las niñas en orfanatos donde malviven y en algunos casos, son sometidas a prácticas inhumanas.
El vestido, tu posición social
Los chinos, desde la antigüedad, siempre le han dado un simbolismo especial a sus ropajes. Por ejemplo: los guerreros de los reinos combatientes, portaban en su tocado dos plumas de ave. Esto simbolizaba la valentía y la fuerza del guerrero.
Una de las peculiaridades más reseñable del vestido tradicional chino es que no se trata únicamente de un signo externo de elegancia, sino que está dotado al mismo tiempo de cierto valor simbólico. Todas las partes de dicho vestido comunican la fuerza vital que les es inherente.
Los principales tipos de vestidos de la tradición china son:
- El pien-fu, compuesto por dos piezas, una túnica que llega hasta las rodillas y una falda hasta los tobillos.
- El ch’ang-p’ao o traje largo, utilizado tanto en hombres como en mujeres.
- Y por último, el shen-i, el cuál es una mezcla de los dos anteriores.
En estos vestidos los colores oscuros predominan sobre los claros, y eran realizados mediante bordados exquisitamente trabajados con colores muy vivos. Los colores claros los dejaban para diario, para trabajar, etc. Los chinos asocian algunos colores con las estaciones del año: el verde representa la primavera; el rojo, el verano; el blanco, el otoño y el negro, el invierno.
Deportes tradicionales
El ejercicio más tradicional chino es el ‘wushu’, conocido por nosotros como ‘kunfú’. Este ejercicio de autodefensa y entrenamiento corporal es practicado por el pueblo chino desde hace miles de años, y a día de hoy, se ha visto intensificada su práctica.
Este deporte consiste en ejecutar movimientos de ataque y de defensa empleando la fuerza y la agilidad. Hay dos categorías del mismo:
- Sin armas.
- Con armas.
Este deporte de tradición e historia milenaria fue inventado y desarrollado por los chinos, tanto como terapia, para el combate como para labor productiva. Dentro del ‘wushu’ hay diferentes divisiones y tipos y las armas que se utilizan en algunos de ellos son el sable, la lanza, la espada, el palo o el látigo, entre otros.
Gracias a la belleza de los movimientos de este deporte, el ‘wushu’ llegó también al escenario y al teatro chino, donde la acrobacia es la habilidad más comúnmente vista.
Todas las nacionalidad chinas siempre han gustado por los deportes cuerpo a cuerpo, siendo la lucha, la principal habilidad desarrollada por ellos.
Si vas a visitar el país amarillo próximamente o lo tienes como destino futuro, ahora ya conoces algunas de las muchas peculiaridades que tiene. Si te interesan este tipo de artículos dónde damos a conocer los orígenes de las diferentes culturas actuales, háznoslo saber en el apartado de comentarios. ¡Gracias!