Panorámica de las vistas que se obtienen desde las barandillas que hay en las cataratas del Iguazú
Una de las atracciones más importantes a visitar en Argentina (junto con el glaciar Perito Moreno y Buenos Aires), son, sin duda alguna, las cataratas del Iguazú. Estas se encuentran en el Parque Nacional con el mismo nombre, el cual se extiende por 670 kilómetros cuadrados de selva subtropical y cuenta con 2.000 especies de plantas vasculares, aves y todo tipo de animales. A continuación, te vamos a dar algunos consejos para que puedas visitar las cataratas sin la multitud de gente que normalmente abunda.
Cierto es que las cataratas son uno de los sitios más visitados a todas horas en el continente americano, por lo que acercarse a la barandilla para contemplarlas puede llegar a convertirse en una tarea más que difícil.
Así que para evitar las aglomeraciones, una de las mejores opciones es ir por la mañana temprano y explorar más tarde zonas como el Sendero Macuco, que es un camino subtropical poco transitado. Otra buena opción puede ser contratar una visitar nocturna, aunque hay que planearla con tiempo, ya que estas visitas sólo se pueden hacer las cinco noches antes y después de la luna llena.
Durante esta visita nocturna, en las que los grupos son reducidos, podrás caminar de manera relajada mientras el guía destaca elementos de interés, como por ejemplo, las fragantes flores que se abren por la noche.
Aunque, sin duda alguna, una de las mejores partes para visitar las cataratas del Iguazú es la Garganta del Diablo, ya que allí hay suficiente espacio para quedarse con la boca abierta ante la cascada más impresionante del Iguazú.