Pueblos de Teruel con encanto

La frase pueblos de Teruel con encanto es casi una redundancia. Porque todas las localidades de esa provincia aragonesa tienen enorme atractivo. Cuentan con cientos de años de historia, numerosos y espectaculares monumentos y un entorno natural privilegiado.

Por si todo ello fuera poco, Teruel, la capital de la provincia, es conocida por su gran patrimonio de arte mudéjar y por leyendas como la de los amantes. En consecuencia, para hablarte de pueblos de Teruel con encanto, nuestro mayor esfuerzo debe ir encaminado a seleccionar algunos de ellos, ya que todos deberían aparecer en este artículo. Sin más preámbulos, aquí te dejamos nuestra propuesta.

Rubielos de Mora

Situada en la comarca de Gúdar-Javalambre y rodeada por las sierras del mismo nombre, lo primero que te ofrece esta localidad es un maravilloso entorno natural. Si te gusta el senderismo, la bicicleta del montaña o el esquí, en esta zona tienes magníficas posibilidades. De hecho, las estaciones de Valdelinares y Javalambre están muy cerca.

En cuanto a su patrimonio artístico, Rubielos es una auténtica maravilla pese a su pequeño tamaño. Cuenta con un bonito casco histórico de cuya muralla se conservan dos entradas: los portales de San Antonio y del Carmen. Además, el primero posee una espectacular torre de mampostería.

Por su parte, el edificio del Ayuntamiento es renacentista del siglo XVI. Lo acompñañan varias casas aristocráticas de esa misma centuria y de la siguiente. Entre estas, la de los condes de la Florida, la de los condes de Creixell o el palacio de los marqueses de Villasegura. De hecho, como anécdota, te diremos que Rubielos llegó a tener tantas casonas señoriales que se la conoció como «la corte de la sierra».

Por su parte, en el antiguo Hospital de Gracia, edificio del siglo XVIII, encontrarás la Fundación Museo Salvador Victoria, dedicada a la obra de este pintor abstracto rubielano. En cuanto al patrimonio religioso de la villa, tienes que visitar la iglesia de Santa María la Mayor, de estilo barroco; los antiguos conventos de las Carmelitas Descalzas y de las Agustinas, este último con una iglesia del siglo XIV, y ermitas como las de los Santos Mártires Abdón y Senén, de Santa Ana, del Pilar o de Santa Bárbara.

Albarracín, único entre los pueblos de Teruel con encanto

Elevada sobre una cota de más de mil metros de altura que corta la espectacular hoz del río Guadalaviar, encontrarás la villa de Albarracín, otro de los pueblos con encanto de Teruel. Porque lo forman calles estrechas y empinadas que desembocan en pequeñas plazas llenas de encanto. No en balde, todo el pueblo es monumento nacional desde 1961.

También sierve como puerta de acceso a la sierra de Albarracín. Por tanto, desde esta localidad puedes iniciar numerosas rutas de senderismo y de bicicleta de montaña. Pero mayor atractivo aún tienen los monumentos que te ofrece esta preciosa villa. Suelen englobarse dentro del Conjunto Histórico de Albarracín, cuyo rasgo común es la peculiar arquitectura de la zona.

No obstante, tienes que visitar el Alcázar, una antigua fortaleza amurallada de época andalusí que fue residencia de los Banu-Razin, soberanos del pequeño reino de taifas de Albarracín. Pero su configuración actual se debe a una reforma del siglo XIII. Junto a él, constituían el sistema defensivo de la localidad la muralla y torres como  las de Doña Blanca y del Andador.

Por su parte, el edificio del Ayuntamiento es de estilo renacentista y fue edificado en el siglo XVI. A esta misma centuria pertenece la catedral del Salvador, construida sobre los restos de un antiguo templo románico. No obstante, también es renacentista, aunque fue reformada dos centurias más tarde añadiéndole la portada barroca. Asimismo, en su interior, que también muestra elementos barrocos, hay un retablo mayor renacentista obra de Cosme Damián. Y en su museo hay una bonita colección de tapices flamencos. FInalmente, también es barroco el Palacio episcopal, que se halla junto a este templo.

Valderrobres

Capital de la comarca de Matarraña y bañada por el río homónimo, la villa de Valderrobres también figura en la asociación de Los Pueblos más Bonitos de España. Asimismo, es una buena zona para que practiques actividades de montaña como el senderismo, la bicicleta, la escalada o las rutas a caballo.

Arquitectónicamente, la localidad se divide en dos partes: el casco histórico y el arrabal. Las separa el puente medieval de Piedra, que entra en la villa por el Portal de San Roque, perteneciente a las antiguas murallas. Al otro lado se encuentra el edificio del Ayuntamiento, construido en el siglo XVI, que es una maravilla de estilo manierista.

Por su parte, en la zona más alta de la villa se encuentra el castillo de Valderrobres, cuyo origen se remonta al siglo XII. Con este se confunde el palacio, edificado en el XVI y muy bien conservado. Asimismo, junto a ellos se encuentra la iglesia de Santa María la Mayor, una joya del gótico levantada entre los siglos XIV y XV. Externamente, destaca en ella la impresionante portada abocinada con un rosetón encima. Pero más curioso es su interior. Porque responde al modelo norteuropeo de una sola nave de salón. Finalmente, entre las casas de Valderrobres destaca la de los Moles, perfecta muestra del gótico aragonés por su tradicional logia. Se daba este nombre a la galería exterior cubierta en la parte alta de las construcciones.

Calaceite, otra maravilla entre los pueblos con encanto de Teruel

Seguimos en la comarca de Matarraña para hablarte ahora de Calaceite, pequeña localidad de unos mil habitantes. Es una zona habitada desde hace muchos siglos, ya que a apenas un kilómetro se halla el poblado íbero de San Antonio, excavado por el arqueólogo local Juan Cabré, que tiene un museo en la villa.

Pero Calaceite tiene otros muchos atractivos. Es el caso de la Plaza de España, aportalada, y de las calles de sus casco histórico, jalonadas de casonas señoriales. Entre estas, la casa taller de Teresa Jassá, la del propio Cabré o la casa Moix. Más espectacular aún es el edificio del Ayuntamiento, construido a principios del siglo XVII y con una típica galería de arquillos en su segundo piso.

Por otra parte, de la antigua muralla quedan la torre y varios portales transformados en capillas. Es el caso de las de San Antonio y de la Virgen del Pilar. No obstante, capilla propiamente dicha es la de San Roque, de estilo renacentista. Pero el monumento religioso más importante de Calaceite es la iglesia parroquial de la Asunción. Fue construida a fines del siglo XVII siguiendo los cánones del barroco. No obstante, la torre se edificó cien años más tarde.

Mirambel

Perteneciente a la comarca del Maestrazgo, esta pequeña villa medieval y amurallada se incluye por pleno derecho entre los pueblos con encanto de Teruel. Como anécdota, te diremos que sirvió como escenario para la película Tierra y libertad, de Ken Loach, director que incluso tiene un paseo a su nombre en la localidad.

Pero mayor importancia tienen los monumentos que te ofrece este precioso pueblo. Todavía se conservan restos de su castillo medieval. Pero, sobre todo, tienes que ver su Palacio Consistorial, construido en el siglo XVI, y casas señoriales como las de Aliaga y Castellot, dos maravillas de estilo renacentista.

Por su parte, la iglesia de Santa Margarita ya aparece mencionada en la Carta Puebla del siglo XIV. Pero quedó destruida en el XIX durante la Primera Guerra Carlista. Sería reedificada porsteriormente en estilo neobarroco. Y en el convento de las monjas Agustinas destaca la iglesia de Santa Catalina, con varios retablos góticos.

Finalmente, Mirambel también te ofrece magníficas rutas de senderismo y bicicleta. Por la localidad pasa la GR-8, que recorre toda la provincia de Teruel de norte a sur. E, igualmente, hay varios senderos que van hasta Tronchón y una ruta de bicicleta de montaña que va a La Cuba.

Puertomingalvo

Retornamos a la comarca del Gúdar-Javalambre para hablarte de otra joya entre los pueblos con encanto de Teruel. Se trata de Puertomingalvo, asentado sobre una zona rocosa en cuya parte más alta está el castillo del siglo XII muy bien conservado. También permanecen restos de la antigua muralla con puertas como el Portalón y el Portalillo.

Tampoco puedes perderte su Ayuntamiento, una maravilla del gótico civil turolense, al que pertenecen igualmente las casas Alta y Lloveros, así como el Hospital de Santa María de Gracia, construido en el siglo XV. Y, ya en las afueras de la villa, tienes varios peirones o mojones de camino y la masía fortificada de Mas de Torre Pintada.

En cuanto al patrimonio religioso de Puertomingalvo, destaca la iglesia parroquial de la Asunción y San Blas, que es barroca del siglo XVIII. La conforman tres naves con un coro alto y una torre campanario a la que puedes subir. Tendrás unas vistas impresionantes de la Sierra de Gúdar. Completan la arquitectura religiosa de la localidad las ermitas de Santa Bárbara y de San Bernabé. Por si todo esto fuera poco, a unos seis kilómetros tienes la cascada del Arquero, una caída de agua del río Linares que forma un espectacular paisaje.

En conclusión, te hemos mostrado varios de los pueblos de Teruel con encanto. Pero no queremos dejar de mencionarte otros igualmente espectaculares. Es el caso de Cantavieja, enclavada en un retorcido meandro; La Fresneda, con su impresionante Plaza Mayor renacentista; Tramacastilla, de casas blancas y rojizas escalonadas en la sierra, o Albalate del Arzobispo, con su impresionante castillo palacio episcopal. Todo ello sin olvidar la inigualable Alcañiz, que es el pueblo más habitado de la provincia de Teruel tras la capital y que tiene un espectacular patrimonio. Anímate a conocer estas preciosas villas y cuéntanos tu experiencia.