La imagen tradicional que tenemos de Japón es de montañas, geishas, trenes ultra rápidos y multitudes, pero eso no es todo. Si miras bien el mapa descubrirás un grupo de islas alejadas de las islas principales que componen la prefectura de Okinawa.
Si te gusta la historia mundial recordarás que aquí tuvieron lugar cruentas batallas durante la Segunda Guerra, pero más allá del capítulo trágico la región es considerada el Caribe de Japón: islas paradisíacas, playas estupendas, calor todo el año y una atmósfera relajada que invita a descansar y divertirse. Pero son tantas islas que como extranjeros no podemos evitar preocuparnos un poco, ¿qué visitamos?, ¿qué hacemos?
Okinawa
No es una única isla sino todo un archipiélago compuesto por numerosas islas, entre grandes y pequeñas, habitadas y poco habitadas. La gente aquí habla un dialecto particular y tiene una cultura propia distinta a la del Japón central y eso tiene una explicación: Okinawa fue durante mucho tiempo un reino independiente. Fue el Reino de Ryukyu y en su momento sumaba un centenar de islas subtropicales situadas a lo largo de 700 kilómetros desde Kyushu hasta Taiwán.
Su clima soberbio ha convertido a esta islas en el destino de vacaciones de verano más popular para los japoneses. Si sumamos el hecho de que están bien conectada con las ciudades más importantes (Tokio, Hiroshima, Osaka, Nagasaki, etcétera), tenemos en nuestras manos un destino tal vez no tan frecuente entre los turistas extranjeros pero la mar de recomendable si es que tu destino es Japón en verano.
Cuándo ir a Okinawa
El clima de estas islas es subtropical y eso quiere decir que hace calor todo el año, inclusive en los meses invernales, aunque no conviene ir ni en enero ni en febrero pues si bien hacen 20 ºC está nublado y algo fresco para meterse en el mar. Entre fines de marzo y abril es un buen momento, pero hay que evitar la llamada Golden Week que es una sucesión de feriados japoneses porque se llena de gente.
La temporada de lluvias comienza en mayo temprano y dura hasta fines de junio así que tampoco resulta conveniente porque llueve todos los días. Queda el verano, caluroso y húmedo, pero aún así la temporada más turística porque después comienza la temporada de tifones y eso sí espanta a la gente.
Cómo llegar a Okinawa
Hay que decir que la mayoría de las aerolíneas de bajo coste tienen vuelos que conectan el centro de Japón con Naha, la capital de la prefectura de Okinawa. Estos vuelos son muy convenientes porque pueden rondar los 90 euros o menos y para nosotros, los extranjeros, hay buenas ofertas que podemos comprar desde fuera de Japón.
Para competir con estas aerolíneas las empresas más grandes tienen tickets especiales que comienzan a venderse, en general, en enero (pensando siempre en un viaje en verano), pero si visitas los sitios web de las aerolíneas de bajo coste encontrarás ofertas más que interesantes todo el año. Hablo de empresas como Peach Aviation, por ejemplo, con tarifas desde 30 dólares. ¡Una ganga!
Los vuelos te dejan mayoritariamente en Naha, y también en las islas Ishigaki y Miyako. ¿Te preguntas por los ferries? No hay muchos ferries, han decrecido bastante en los últimos años y las distancias entre las islas centrales y Okinawa son enormes así que el avión es más conveniente. Incluso los ferries entre islas cercanas son poco frecuentes y los aviones van y vienen siendo el medio de transporte más usual.
Qué visitar en Okinawa
Si llegas a Naha, la isla principal del grupo tiene muchas atracciones y concentra la típica vida de una ciudad, pero en verdad conviene dejarla después de un par de días porque si buscas belleza caribeña hay que ir a otras islas.
Las islas Kerama, por ejemplo, son un buen destino. Están a unos 30 kilómetros de Naha, son las islas más cercanas: 20 islas grandes e islotes de arena y coral que componen una postal preciosa y un sitio genial para ir a bucear y hacer snorkel. De un tiempo a esta parte creció el turismo debido a la suspensión de los ferries desde Naha a las Islas Yaeyamas y Miyako así que cuando se trata de hacer excursiones cortas la gente opta por venir aquí.
Otras islas cercanas a Naha son las Islas Iheya, una isla con mucha historia y cultura, y Noho, que está conectada a la primera mediante un puente. Si quieres un poco de historia okinawense estas dos islas son buenos destinos. Otra cosa que puedes conocer es la Ruta a través del mar o Kaichu-doro. Se trata de una ruta turística de casi cinco kilómetros de largo que conecta la península Yokatsu en la isla central que la conecta con la isla Henza. Es la mejor ruta para hacer en coche.
Otro destino es la isla Ishigaki-Jima y desde allí puedes llegar en ferry hasta la Isla Taketomi. La isla Kumejima está a solo 90 kilómetros y ofrece un reguero de playitas encantadoras siendo la mejor la Hatenohama, aunque solo se llega en tour. ¿Cómo se llega a esta isla? En avión, hay entre seis y ocho vuelos diarios, vuelos de media hora nada más, desde Naha o desde el aeropuerto de Haneda en verano hay un vuelo directo por día. El ferry desde Naha ofrece dos servicios por día con una duración de no más de cuatro horas..
Una vez en la isla podemos alquilar un coche, una moto o una bici. Por lo demás, hay otras islas preciosas pero si bien son conocidas y recomendables no están nada cerca de Naha. Hablo de las Miyako, por ejemplo, un paraíso que está, lamentablemente, a 300 kilómetros de distancia. El ferry no funciona más así que la única manera de conocerlas es llegar en avión.
La cuestión es esta: si tienes poco tiempo conviene hacer base en Naha, disfrutarla unos tres días y saltar a otra isla cercana para estar más en contacto con la bella naturaleza del lugar. Naha ofrece vida nocturna, atracciones históricas, gastronomía y las comodidades de una típica ciudad japonesa. El resto de las islas, si bien cuentan con poblaciones con vida propia, tienen una oferta más de naturaleza.
Si tienes más tiempo lo ideal es pasar algunos días en Naha y después sí alojarte directamente en alguna de estas islas lejanas y hermosas, pero estamos hablando de más de una semana de estadía, algo poco frecuente cuando uno va de viaje a Japón.