Barbastro

Vista de Barbastro

Barbastro

Barbastro se halla situado en una encrucijada de caminos que lleva a Huesca por el oeste, a Lérida por el este y a la parte oriental del Pirineo aragonés por el norte. Asentada en el cauce del río Vero, Barbastro también es la capital de la comarca del Somontano por lo cual, si te gusta el enoturisno, te hallarás en ella maravillosamente.

Pero además, la localidad oscense también ha sabido combinar modernidad y tradición, con un casco histórico plagado de callejuelas estrechas y monumentos junto a una parte actual que te ofrece excelentes alojamientos. Unos alrededores aptos para la práctica del senderismo y de los deportes de aventura, especialmente en el cercano Parque Natural de la Sierra y los Cañones de Guara, completan la oferta que te brinda Barbastro. Si quieres conocerlo un poco mejor, te invitamos a seguirnos.

Qué ver en Barbastro

Barbastro se remonta históricamente a la época romana, pero la mayoría de sus monumentos pertenecen a la Edad Media, el Renacimiento y tiempos posteriores. Vamos a ver algunos de ellos.

Catedral de la Asunción

Fue edificada como colegiata en el siglo XVI y es una de las mejores muestras de arquitectura gótico-renacentista de Aragón. Posee una planta de salón con tres naves de idéntica altura y rematadas por espectaculares bóvedas de crucería estrelladas. Exenta a ella se encuentra la torre campanario, de planta octogonal.

En su interior, tienes que ver el magnífico retablo mayor de alabastro y madera policromada que fue creado por Damián Forment, el mejor escultor renacentista de la Corona de Aragón. Igualmente espectacular es la sillería del coro, obra de Comón y Jubero y del mismo estilo que el anterior.

La iglesia de San Francisco

Iglesia de San Francisco

Barrio de Entremuro

La catedral se halla en este barrio, que dio lugar a Barbastro cuando los musulmanes fundaron la ciudad en el siglo IX. Conserva sus calles estrechas y empinadas de trazado medieval. Visita la plaza de la Candelera, donde se concertaron los esponsales de doña Petronila, hija de Ramiro II de Aragón, y Ramón Berenguer IV, conde de Barcelona.

El conjunto de San Julián y Santa Lucía

Está formado por el antiguo Hospital de Barbastro, la iglesia de San Julián y la plaza de toros. El primero, del siglo XIX, alberga las oficinas del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Somontano y el Espacio o Museo del Vino, mientras que la segunda acoge el Centro de Interpretación de esta variedad vinícola.

Otras iglesias de Barbastro

La localidad oscense cuenta con otras muchas edificaciones religiosas que debes visitar. Así, la iglesia de San Francisco, una maravilla del siglo XIII que es el último vestigio de un monasterio ya desaparecido. Junto a ella, encontrarás la fuente renacentista del mismo nombre y la llamada Prensa de Puy de Cinca, una colosal prensa de libra de aceite procedente de la localidad que le da nombre.

También debes visitar la iglesia de las Madres Capuchinas, situada en el barrio de Entremuro y edificada en el siglo XVIII; la de los Padres Misioneros, del XIX; la sencilla capilla de Santa Ana y las ermitas de la Virgen del Plano y de San Ramón del Monte.

Monasterio del Pueyo

Pero más espectacular aún es este cenobio ubicado a tres kilómetros de Barbastro. Se halla sobre una colina y te ofrece maravillosas vistas de la comarca del Somontano. Fue edificado en el siglo XV y en su interior destacan la biblioteca, con volúmenes de gran valor, y el Camarín de la Virgen, que está cubierto por una cúpula ornamentada con pinturas del siglo XVIII.

La plaza del Mercado de Barbastro

Plaza del Mercado

Conjunto de la plaza del Mercado de Barbastro

Enmarcada por casas tradicionales aragonesas con soportales, en esta plaza se encuentra la capilla de Santa Ana, que ya te hemos mencionado, la casa natal de José María Escrivá de Balaguer, así como la Casa Calonge y los Almacenes San Pedro. Estas dos últimas construcciones son dos bellezas de estilo historicista con toques propios del Modernismo.

Plaza de la Constitución

En ella puedes ver tres edificios destacados: el del Ayuntamiento, construido en el siglo XV; el del colegio e iglesia de los Escolapios y el de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados, del siglo XIX.

Palacio de los hermanos Argensola y otras casas señoriales

El primero, casa natal de Lupercio y Bartolomé Leonardo de Argensola, ilustres poetas del Siglo de Oro español, es un magnífico ejemplo de la arquitectura civil del Renacimiento en Aragón. Destaca por sus grandes dimensiones, pero sobre todo por el voladizo de madera labrada de su parte superior.

No es el único edificio señorial que puedes ver en Barbastro. También te recomendamos las casas Latorre y Baselga, igualmente renacentistas; la Casa Fierro, de estilo racionalista; la Casa Palá, buen ejemplo de Modernismo, o las ya mencionadas de los Almacenes San Pedro y Casa Calonge.

El Ayuntamiento de Barbastro

Ayuntamiento de Barbastro

Qué comer en Barbastro

Después de tanto caminar visitando monumentos, te apetecerá reponer fuerzas. Y en esto tampoco defrauda Barbastro. Es una tierra rica en productos hortícolas como el cardo, el tomate rosa o la borraja pero, sobre todo, es la capital de vino Somontano.

Platos típicos que debes probar son el ternasco asado; la chireta, que es tripa de cordero rellena de arroz, tocino, jamón y vísceras del propio animal; la empanada goguera, que lleva carne de ave o de caza; la lengua de ternera a la oscense; la llebrada o guiso de liebre y los pichones al salmorejo.

En cuanto a los dulces, tienes los crespillos, que se hacen con borraja rebozada y frita; el pastillo o empanadico, que es una empanada dulce, y el pastel Biarritz, que se elabora artesanalmente con almendra.

Para beber, no puede faltar una copa del magnífico vino de la denominación de origen Somontano, que ya te hemos mencionado.

Cuándo es mejor visitar Barbastro

La localidad oscense posee un clima de tipo mediterráneo continental. La temperatura media anual es de unos catorce grados. Sin embargo, al tratarse de una zona prepirenaica, los inviernos son frescos aunque no demasiado fríos. Por su parte, los veranos, especialmente julio y agosto son bastante calurosos.

Edificio de la bodega Irius

Bodega Irius

Por su parte, las precipitaciones no son demasiado abundantes y se reparte a lo largo de todo el año. Por todo ello, quizá la mejor época para visitar Barbastro sea la primavera. Además, su Semana Santa ha sido declarada de Interés Turístico Nacional. No obstante, si te gusta la Enología, te recomendamos que vayas en agosto, cuando se celebra el Festival del Vino Somontano.

En conclusión, como puedes apreciar, Barbastro te ofrece uno de los mejores programas turísticos que puedes hacer en la provincia de Huesca en particular y en Aragón en general. Tiene monumentos que ver, una magnífica gastronomía que probar y preciosos paisajes del Prepirineo aragonés que recorrer.


Sé el primero en comentar

Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

*