Quedan pocos países comunistas en el mundo y uno de ellos es Corea del Norte. La pregunta es, ¿puedo hacer turismo ahí? No es un país abierto al turismo masivo pero aun así, puede visitarse.
¿Te interesa abrir esta ventana al pasado? ¿O acaso es un mundo paralelo? Lo cierto es que sin dudas puede ser una experiencia inolvidable. Veamos entonces cómo se puede hacer para viajar a Corea del Norte, qué procedimiento hay que seguir y qué se puede hacer allí.
Corea del Norte
La República Popular Democrática de Corea está en el este de Asia y es la parte norte de la península coreana. Tiene frontera con China y Rusia y por supuesto con Corea del Sur, Zona Desmilitarizada mediante.
La península coreana estuvo en manos de los japoneses desde 1910 hasta el final de la Segunda Guerra Mundial (de aquí que a los coreanos no les gusten muchos los japoneses), pero tras el conflicto fue divida en dos zonas.
De un lado estaban las fuerzas de la Unión Soviética y del otro las de Estados Unidos. Todas las negociaciones para reunificar el país fracasaron y así, en 1948, nacieron dos gobiernos, la Primera República de Corea (en el sur), y la República Democrática Popular de Corea, en el norte.
Corea del Norte es un estado socialista, con un culto a la personalidad del líder propio de otras épocas. Es el tercer miembro masculino de la familia Kim que gobierna. Es un país que vive en el pasado socialista: empresas del estado, granjas colectivas y un ejército que se lleva mucho dinero.
Con respecto a la cultura, si bien hay una clara influencia china, lo cierto es que la cultura coreana en su totalidad (del sur y del norte) ha adquirido una forma única que ni siquiera la violencia cultural ejercida por los japoneses durante la ocupación pudo borrar. Ahora bien, en los años siguientes a la liberación los surcoreanos empezaron a tener un gran contacto con el mundo mientras que los de Corea del Norte empezaron a encerrarse.
Así, si Corea del Sur nos resulta una nación moderna, Corea del Norte ha vuelto a una cultura tradicional, con muchas formas folclóricas que han ganado nueva fuerza.
Viajar a Corea del Norte
Coincidimos en que no es lo más típico del mundo viajar como turista a Corea del Norte. Y algunas personas directamente no pueden hacerlo, por ejemplo, los estadounidenses, los surcoreanos o los de Malasia. El resto podemos ir, pero siguiendo una serie de pasos.
Primero, no puedes ir a Corea del Norte por tu cuenta. Solo a través de un operador de turismo que tiene que hacer las reservas en tu nombre e incluso tramitar la visa, firmar un acuerdo, darte una copia de ese acuerdo para tu pasaporte.
Antes había restricciones más duras pero de un tiempo a estar parte son las laxas y te piden solo especificar nombre de la empresa para la que trabajas y profesión. Pero atención, si por casualidad trabajas en un medio de comunicación o alguna organización política pro derechos humanos, cabe la posibilidad de que no te den la visa.
Siempre se pasa primero por China y la visa de Corea del Norte la puedes recibir estando allá. Eso te lo explicará la agencia. Lo bueno, algo bueno tenía que haber, es que el trámite no lo haces tu en la embajada.
Puede que te sellen el pasaporte en aduana como puede que no. Y la visa no va en el pasaporte sino aparte. Y debes entregarla al salir del país. ¿Te la quieres quedar como recuerdo? Conviene fotocopiarla, peor siempre preguntando al guía de turismo si puedes o no hacerlo. Conviene no meter la pata.
Con respecto a las opciones que hay en materia de tours es genial saber que podrás ver más que la ciudad capital, Pyongyang. Puedes ir a Rason, una zona especial económica, puedes esquiar en Masik, escalar el monte más alto que es la Montaña Paektu o asistir a algún evento cultural.
Sí se pueden tomar fotos. Se dice que no te dejan, pero no es verdad o al menos no del todo. Siendo discreto, preguntando a tu guía y sin hacer un show de la fotografía es posible. Y obviamente, todo depende de dónde estés y a qué o quién le quieras tomar una foto.
A los turistas no se les permite cargar libros o CD’s ni nada de eso, no vaya a ser cosa que influyas sobre la santa cultura norcoreana. Y lo mismo funciona al revés, nada de llevarte «souvenires». Recapitulando un poco, ¿qué sitios puedo visitar en Corea del Norte?
Pyongyang es la puerta de entrada. Vas a pasear por plazas y plazas con muchas estatuas. El tour es bien político en esta ciudad porque no vas a dejar el país sin una buena imagen del líder. Entonces, verás el Palacio Kumsusan del Sol, el Monumento al Partido Fundante, la Plaza Kim II-sung, el Arco del Triunfo, y el Mausoleo de Kim II-sung y Kim Jong-il o el Monumento de la Colina Mansu.
Más allá del autobús también se puede viajar en metro, algo posible para extranjeros solo desde 2015, o pasear en bicicleta o hacer compras. Eso sí es más divertido y sin lugar a dudas, inolvidable. Después, otro destino es Rason, la zona económica especial. Muy especial, el único lugar donde la dictadura comunista permite ciertos chispazos capitalistas. Es una ciudad que está super cerca de las fronteras con Rusia y China.
Masik es el destino para esquiar. Aquí está el Masikryong Ski Resort, un sitio de buen nivel en materia de medios de elevación, equipos y alojamiento. Y muchos karaokes y restaurantes. Puedes subir a 1200 metros y disfrutar de 100 kilómetros de pistas.
Chongjin es la tercera ciudad más grande de Corea del Norte y es su corazón industrial. Está alejada y recibe pocos visitantes ero tal vez por eso te guste más. Tiene una plaza central que es su punto más atractivo, con sus estatuas de los líderes, obvio. Y hasta aquí llegamos. En verdad no hay mucho más. Entre que es un país sumamente pequeño y tiene un millón de restricciones…
Bueno, por último podemos nombrar los tour operadores: Koryo Tours (algo cara, suele recibir viajeros de más edad y no tanta gente joven), Uri Tours (fueron los que organizaron el viaje de Dennis Rodan), Lupine Travel y Juche Travel Services (ambas inglesas), Rocky Road Travel (con sede en Beijing), FarRail Tours y KTG. Estos están en la web siempre, pero uno muy popular también es Young Pioneer Tour.
Esta última agencia ofrece tours básicos desde 500 euros (alojamiento, tren Beijing- Pyongyang – Beijing, comidas, traslados con guías, entradas. No incluye gastos extras, bebidas y propinas, pero se hacen cargo de tramitar la visa y los pasajes.Obvio, todas estas agencias trabajan con el gobierno norcoreano así que básicamente se trata de tours organizados por él.
En Corea del Norte nunca estarás solo. Puede ser que no viajes en grupo, sí, pero una vez en suelo norcoreano te harán siempre compañía, desde tu llegada hasta tu partida, desde que te levantes en la mañana hasta la noche. Tampoco puedes dejar solo el hotel, ni apartarte del guía o del grupo, ni gritar, ni correr, ni tocar las estatuas o imágenes de los venerables líderes, o tomarles fotos cortando la cabeza…
No hay grandes comodidades ni lujos, la vida es muy simple, al borde de lo precario en algunos casos. No hay publicidades en la vía pública, no hay Internet, el control es permanente. Puede ser que no encuentres papel higiénico o jabón, que cuanto mas te adentres fuera de la capital vayas a sitios sin electricidad o agua caliente. Es así, todo aquel que fue dice que la sensación de extrañeza e irrealidad son tremendas.
Lo cierto es que un tour así dista de ser un viaje de placer o de vacaciones, pero ciertamente es algo que nunca, jamás, olvidarás.