Excursión al Monte Takao, destino panorámico en Tokio

La semana pasada os comenté que en mi último viaje a Japón me concentré en Tokio y sus alrededores. Cuando no es el primer viaje tienes más tiempo de conocer sitios no tan turísticos o que por lo menos no eliges en tu primera incursión en el país.

Así, una mañana de febrero, fresca y soleada, decidimos marchar al Monte Takao para poder salir de la jungla de concreto y avistar la megalopolis de Tokio desde lejos. Aquí os dejo toda la información práctica para visitar el Monte Takao y mi experiencia.

El Monte Takao

Se encuentra a una más o menos una hora del centro de Tokio y no es una montaña tan alta pues mide unos 599 metros. Pero la distancia y esa altura permiten unas vistas geniales y descubres cuan montañoso es Japón en toda su geografía.

El monte es un destino muy popular de senderismo y hay muchas rutas, unas ocho, que pueden seguirse y están señalizadas. Lamentablemente casi todos los letreros siguen estando en japonés solamente pero basta ubicarse un poco para no perderse.  El monte forma parte del Parque Cuasi Nacional Meiji no Mori Takao y en el folclore nipón se lo asocia con un kami llamado tengu. Un tengu es una criatura legendaria, algo humana, algo ave, ser algo demoníaco que a la postre se convirtió en protector, espíritu de las montañas y los bosques.

Cómo llegar al Monte Takao

Desde la estación de tren Shinjuku, en el corazón de Tokio, tomas el tren y en solo 50 minutos llegas. El tren pertenece a la línea Keio y hay trenes directos semi limitados. El precio es de 390 yenes, unos cuatro dólares americanos y hay servicio cada 20 minutos. Te dejan en la estación Takaosanguchi.

También, si tienes el Japan Rail Pass y quieres aprovecharlo lo puedes usar: tomas en Shinjuku la JR Chuo Line hasta la estación Takao y allí haces conexión con la Keio. Es una estación sola y apenas cuesta 130 yenes. Te ahorras los 390  porque utilizas los trenes japoneses nacionales. La estación de conexión está construida a cierta altura así que mientras esperas el servicio Keio puedes empezar a contemplar el paisaje.

Tras un viaje de apenas tres minutos llegas a la estación Takaosanguchi, perteneciente a un pueblecito de montaña muy pintoresco. Estás a pocos metros de la estación del cablecarril, la forma más rápida de subir pero no la única pues por supuesto puedes trepar caminando. Yo fui en febrero y hacía frío así que el cablecarril fue lo mejor.

Puedes pagar el viaje ida y vuelta, 930 yenes, o pagar solo ida por 480 yenes y si te apetece bajar caminando lo haces y si no arriba vuelves a comprar el ticket para bajar. El viaje es breve pero hay una parte super empinada en la que casi quedas vertical. ¡Fantástico! Como febrero sigue siendo invierno y este año fue un mes bastante frío la nieve se había conservado en las montañas así que era una vista encantadora.

Este cablecarril funciona de 8 am a 5:45 pm aunque los días festivos y en vacaciones su horario de funcionamiento se extiende. No cierra ningún día. De haber sido primavera o verano tal vez me hubiera inclinado por la aerosilla, otro medio de elevación disponible, pero con el viento frío me hubiera congelado. La aerosilla tiene el mismo precio que el cablecarril pero funciona entre las 9 am y las 4:30 pm y hasta las 4 pm entre diciembre y abril.

Lo cierto es que si vas en primavera, con los cerezos en flor, o en otoño con sus colores fulgurantes, la aerosilla debe ser genial.

El Monte Takao

Una vez que te bajas del cablecarril puedes optar por comer algo y después arrancar. En los alrededores de la estación hay algunas cafeterías y tiendas que venden recuerdos gastronómicos. También están las populares máquinas expendedoras de bebidas y muchos bancos para descansar. Verás que se abren distintas rutas y ya desde ese punto tienes algunos puntos panorámicos excepcionales para tomar las primeras fotografías.

Si vas con tiempo allí mismo puedes empezar el tour visitando el Parque de los Monos que abre por la mañana y no cierra ningún día del año. La entrada cuesta 420 yenes. Japón y los monos son amigos entrañables y este es un buen sitio para verlos en acción.  Hay una zona cerrada con vidrio donde viven unos 40 monos que hacen shows varias veces al día y también un bonito jardín de flores silvestres, más de 500 especies. Yo seguí mi ruta pues era temprano y quería aprovechar el sol ya que por las tardes Tokio siempre se nublaba.

Verás muchos japoneses, ancianos en su mayoría, y eso me sorprendió gratamente, que están vestidos de excursionistas y van y vienen por la montaña como si tuvieran 30 años menos. El Sendero 1 comienza en la base del monte pero es dura la trepada, aún con sus tramos pavimentados, así que casi todos comienzan arriba. Hay senderos que no están pavimentados y no todos pasan por la estación el caeblecarril y la aerosilla.

Otros senderos estaban cerrados en esta ocasión porque había nieve y eran resbaladizos. Lo cierto es que en cualquier época del año es un sitio fantástico, con mucha vida salvaje pues hay más de 1200 especies de plantas y animales e insectos, entre ardillitas y monos. En primavera es in sitio repleto de cerezos en flor, algo digno de ver (si vas entonces te recomiendo seguir una media hora después de la cima hasta la zona conocida como Itchodaira). Aquí hay variedad de cerezos.

Y por último si no te vas a mover mucho de Tokio y quieres experimentar un onsen, un baño tradicional japonés, aquí puedes hacerlo. Está el Keio Takaosan Onsen Gokurakuyu con sus baños separados de varones y mujeres. Esta vez no pude disfrutar de un onsen porque no quería separarme de mi esposo pero si vas con amigos es super recomendable.

El Monte Takao es un gran destino para hacer una excursión desde Tokio. Si fuiste antes de 2015 te aconsejo volver porque la estación fue renovada por completo y es una cálida belleza de madera. Los fines de semana hay mucha más gente, pero si vas de lunes a viernes podrás disfrutar casi en soledad.


Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

*