Viajar a Málaga con niños puede ser una experiencia maravillosa. Son muchos los atractivos que te ofrece la ciudad andaluza para los más pequeños. Cuenta con numerosos monumentos que les permitirán aprender la dilatada historia de la zona.
Pero también dispone de museos, algunos incluso interactivos, y otras atracciones en las que pasarán un día muy entretenido. Y, por si todo ello fuera poco, te ofrece un extraordinario clima, unas magníficas playas y una deliciosa gastronomía con recetas típicas que son conocidas en todo el mundo. Por todo esto, a continuación, te mostramos qué ver y qué hacer en Málaga con niños.
Visitar el centro histórico de la ciudad
El centro histórico de Málaga se configura en torno a la Alameda Principal, una calle que se creó en el siglo XVIII. Pero también lo conforman la famosa calle Larios, que comunica la plaza de la Constitución con el puerto. Estas vías y las adyacentes tienen numerosas construcciones realizadas entre los siglos XVI y XIX como, por ejemplo, el palacio de los condes de Buenavista, la casa natal de Picasso (hoy convertida en museo) y el palacio de la Aduana.
Pero también es fácil encontrar vestigios del pasado fenicio, romano, árabe e incluso judío de la localidad, como veremos a continuación. En este sentido, no debes confundir el centro histórico con el llamado Conjunto Histórico de Málaga. Este último es una categoría dentro de los bienes de interés culturales y abarca un espacio mucho más extenso.
La Alcazaba
Se trata de una fortificación árabe del siglo XI construida sobre los restos de otra anterior fenicia. De hecho, responde a los cánones de la arquitectura militar del periodo taifa, aunque sufrió varias ampliaciones y reformas posteriores. La encontrarás en la base del monte Gibralfaro y conjuga elementos bélicos como saeteras, torres albarranas, matacanas y murallas almenadas con los de un bello palacio nazarí, por ejemplo, patios y estanques.
Castillo de Gibralfaro
Se encuentra en el mismo monte y estaba comunicado con la anterior mediante un barrio hoy desaparecido llamado La Coracha. Precisamente, se construyó para defender la Alcazaba a mediados del siglo XIV, aunque también sobre un recinto fenicio.
Tiene dos líneas de murallas y ocho torreones, los cuales hacían de él una de las fortalezas más inexpugnables de toda la Península Ibérica. En la actualidad, es una de las mejores visitas que puedes hacer en Málaga con niños para que descubran su historia. De hecho, hay un centro de interpretación. Y, desde la torre del homenaje tienes magníficas vistas de la ciudad.
Teatro romano
En la misma zona de la que estamos hablándote, tienes el teatro romano. Pertenece a la época imperial y está declarado Bien de Interés Cultural desde 1972. No obstante, en el lugar donde se encuentra se han hallado restos arqueológicos anteriores que se remontan a la fundación de Malaka. Incluso se han decubierto inscripciones púnicas.
El teatro tiene unas dimensiones medianas, con el graderío o cavea excavado en el propio monte Gibralfaro. A sus pies estaba la orquesta y, seguidamente, la escena delimitada por un muro con exedras o asientos circulares. Asimismo, bajo esta construcción se han descubierto unas termas aún más antiguas.
Mercado Central de Atarazanas
También se encuentra en el centro histórico de Málaga. Es uno de los mejores ejemplos de la arquitectura del hierro del siglo XIX en la ciudad, aunque cuenta con un arco y portada nazaríes del XIV. Su creador fue el arquitecto Joaquín de Rucoba.
Por tanto, la construcción combina de manera armónica los elementos neoárabes con los típicos de funcionalismo modernista habitual en la época de su construcción. De hecho, se inspira en otros mercados de su tiempo como, por ejemplo, el de Le Halles de París. Además, tienes que fijarte en sus espectaculares vidrieras decoradas con motivos heráldicos y monumentales.
La catedral y otros edificios religiosos que ver en Málaga con niños
La catedral de la Encarnación es una de las joyas renacentistas del sur de España. No en balde, en su edificación participaron arquitectos como Diego de Siloé y Andrés de Vandelvira. Pero, como su construcción se prolongó entre principios del siglo XVI y finales del XVIII, también cuenta con elementos góticos y barrocos.
Asimismo, en su interior, debes fijarte en la sillería del coro, obra de Pedro de Mena; en el altar mayor, debido a Diego de Vergara, y en los órganos del siglo XVIII creados por Julián de la Orden. Todo ello forma parte del tesoro catedralicio junto a capillas como la de la Encarnación, debida a Ventura Rodríguez, y a pinturas de Alonso Cano o Claudio Coello.
Pero hay otros muchos templos que puedes visitar en Málaga con niños para que estos aprecien su valor monumental. Las iglesias de San Juan, Santiago, los Mártires y San Lázaro responden al gótico-mudéjar. En cambio, las de San Felipe Neri y del convento de San Agustín son neoclásicas debidas al arquitecto José Martín de Aldehuela. En fin, la iglesia del Sagrario, que encontrarás junto a la catedral, es gótica isabelina. Y el santuario de la Victoria destaca por albergar la imagen de la Virgen del mismo nombre y la espectacular cripta de los condes de Buenavista.
Jardín Botánico, parque del Cine y otros espacios lúdicos
La oferta de Málaga para niños también incluye numerosos parques y espacios naturales donde podrán jugar. Entre ellos, destaca el Jardín Botánico de la Universidad, que se encuentra a las afueras y que está delimitado por otros cuatro: La Concepción, la finca San José y los jardines históricos de La Cónsula y El Retiro.
También el parque de Málaga es magnífico conjunto botánico. Lo encontrarás paralelo al puerto y enmarcado por el neogótico Hospital Noble y la mudéjar plaza de toros de La Malagueta. Precisamente, en el recinto portuario, tienes el Palmeral de las Sorpresas. Finalmente, en el barrio de Teatinos hallarás el parque del Cine, un espacio natural de diez mil metros cuadrados dedicado al séptimo arte e inaugurado en 2010.
Museos que ver en Málaga con niños
La oferta museística de la ciudad andaluza es realmente impresionante. Entre los dedicados al arte tienes el consagrado a Picasso, que se encuentra en el renacentista palacio de los condes de Buenavista y que no debes confundir con el de la casa natal del pintor. También está el Centro Pompidou, el Museo Carmen Thyssen y el Centro de Arte Contemporáneo.
Por su parte, el Museo de Málaga y el del Patrimonio Municipal tienen valor arqueológico y el Catedralicio está dedicado a lo religioso. De tipo temático son el del Vino, el del Vidrio y el Cristal, el del Transporte Aéreo y el de la Automoción.
Pero, para visitar en Málaga con niños, quizá sea más divertido el del Videojuego, también conocido como Oxo Museo. En él podrán conocer la historia de este divertimento, así como nuevas formas de jugar. Y todo ello con experiencias inmersivas. Asimismo, es interactivo el de la Música, donde verán instrumentos procedentes de todas partes del mundo y de cualquier época. Además, en el espacio «se ruega tocar», podrán aprender a partir de su propia experimentación.
Pero quizá más curioso todavía sea el Museo de la Imaginación. En este, tus hijos quedarán sorprendidos por las ilusiones visuales que plantea, sus juegos de luces y sombras e incluso la música que no solo se escucha con los oídos.
En cierta medida, se parece al anterior Cliché Selfie Gallery Málaga, una galería sensorial e interactiva en la que puedes vivir una experiencia innovadora y divertida con tus hijos. Pero, si de jugar hablamos, la oferta de Málaga para niños incluye juegos al aire libre como Magic Portal, donde tendrán que perseguir por las calles a trolls y otras criaturas mitológicas.
Ir a las playas de Málaga
Pero, si de la Costa del Sol te hablamos, una de las principales actividades que puedes hacer en Málaga con niños es ir a la playa. Son varios los arenales que te ofrece la ciudad andaluza. El más popular es el de La Malagueta, que está próximo al centro. Destaca por sus arenas limpias y sus aguas tranquilas. Además, te ofrece todos los servicios, incluso tiene chiringuitos, y sus vistas son extraordinarias.
También puedes acercarte a la playa del Palo, que destaca por sus más de mil metros de longitud y sus aguas cristalinas. Más pequeña es la de Guadalmar, con sus cuatrocientos metros. La encontrarás en el barrio de Churriana y sus arenas son oscuras. En la de la Misericordia verás la torre Mónica o chimenea de Los Guindos, que perteneció a una antigua fundición de plomo. En fin, también te aconsejamos las playas de Baños del Carmen, de El Candado y de Pedregalejo.
Comer espetos y otras delicias de Málaga
Precisamente, en esta última playa tienes varios chiringuitos en los que saborear los deliciosos espetos. Comer bien es otra de las cosas que puedes hacer en Málaga con niños y las sardinas preparadas en un palo y a la brasa son una de las delicias de la zona. Las encontrarás en cualquier bar de playa, pero también en restaurantes de la ciudad.
Sin embargo, no terminan ahí los sabores que puedes disfrutar en Málaga. Muy típico de la localidad es también el gazpachuelo, una sopa que lleva caldo de pescado, mayonesa y trozos de huevo, gambas, pan o incluso patatas. Y, como postre, tienes las locas, que son tortas elaboradas con azúcar, huevos, anís o canela.
Claro que, si te gusta lo dulce y quieres un tentempié consistente, puedes acercarte a Casa Kiki, donde encontrarás distintos tipos de palmeras, pero todas enormes. También tienen cañas, pasteles e incluso locas gigantes.
En conclusión, te hemos mostrado lo mejor que puedes hacer en Málaga con niños. Como ves, esta ciudad tiene mucho que ofrecerte. Pero también puedes conocer los pueblos de sus alrededores, que están llenos de encanto. Anímate a disfrutar de esta zona de Andalucía.