Oimiakón, el pueblo más frío del planeta

Si pusiéramos en cualquier buscador de internet «cuáles son los destinos más insólitos para viajar», sin duda alguna, Oimiakón estaría entre ellos. La razón es bien sencilla: es el pueblo habitable más frío de todo el planeta, y lo de «habitable» tengo mis serias dudas. ¡Yo no podría!

Este pueblo ha salido varias veces en las noticias del telediario no por casos de violencia (que los desconozco, la verdad), sino por ser el pueblo que alcanza las temperaturas más mínimas de todo el planeta. Y es que sólo de pensarlo me está entrando más frío. Si quieres saber un poquito más de este insólito lugar y conocer cómo viven, si es que lo hacen, las personas que habitan este pueblo, sigue leyendo un poquito más junto a nosotros.

A -50 grados

Si la pregunta es: ¿se puede vivir a -50 grados? La respuesta es que sí, pero depende. Depende porque es vivir a duras penas… Oimiakón, es un pueblo situado en el noreste de la república de Sajá, en el este de Siberia (Rusia). Está  situado también junto al río Indigirka, quizás este hecho lo haga ser más frío aún si cabe.

Dicho pueblo fue noticia en una ocasión por llegar a la insólita temperatura de -71,2 grados… Y si sólo fuese un día o una temporadita corta pues estupendo, pero no, allí el invierno dura nada más y nada menos que 9 largos meses.

Algunos datos con los que tienen que lidiar las personas que habitan aquel lugar son:

  • La gasolina que lleva el depósito de los coches se congela si el motor se apaga, es por esta razón que o bien no paran los que permanecen en la calle o se aparcan en garajes con calefacción.
  • Los peces se congelan en apenas un minuto, al igual que la leche, el agua y casi cualquier líquido… Por lo que apenas se necesita de congelador. Estos alimentos suelen guardarse en el sótano de las viviendas, que permanecen lo suficientemente fríos para conservar dichos productos.
  • Los animales sobreviven siempre y cuando permanezcan en establos durante la noche y los perros suelen tener una capa de piel más gruesa y grasa que les permite alejar el frío.
  • No se puede usar bolígrafos porque la tinta se solidifica; por tanto, el lápiz normal de grafito es el usado para pintar o escribir.

No conozco personalmente a nadie que haya estado por allí pero contamos con la experiencia del fotógrafo Amos Chapple, que reside en Nueva Zelanda, y que contó a la página de Weather cómo fue su experiencia en tal sitio:

«Llevaba puestos unos pantalones finos la primera vez que salimos al exterior, a – 47° C (-52° F). Recuerdo sentir cómo el frío se aferraba físicamente a mis piernas, la otra sorpresa fue que en ocasiones mi saliva se congelaba en agujas que pinchaban mis labios».

Lo que peor llevó de aquel sitio este fotógrafo no era ya sentir el frío en su piel sino que le era prácticamente imposible realizar su trabajo en condiciones ya que el zoom y enfoque de su cámara de fotos se bloqueaba, impidiéndole así realizar todas las tomas y fotografías que requería. De él son algunas de las fotos que os adjuntamos en este artículo. Cuenta también que el único hecho de respirar se hacia casi insoportable cuando el frío era tan intenso, que eran como

A pesar de todo, se dice y se cree que es allí en ese pueblo donde existe una de las tasas más inferiores de mortalidad y donde las personas viven un número mayor de años que el resto, por este frío en concreto. ¿Será verdad entonces eso de que el frío conserva mientra que el calor deteriora?

¿Qué encontramos de interés en el pueblo habitado más frío del planeta?

Son pocas las cosas de interés que encontrarás, si eres aventurero y arriesgado y decides visitarlo:

  • Pista de aterrizaje de la Segunda Guerra Mundial.
  • Un único hotel de 10 habitaciones y con agua caliente en todas ellas (los habitantes del pueblo no disponen de agua caliente en sus casas).
  • Fábrica de leche que cierra desde el mes de octubre hasta marzo.
  • Una escuela.

¿Merece entonces viajar a tal sitio para sentir el frío más glacial y polar que existirás en toda tu vida únicamente para ver estas pequeñas cosas? Yo mejor, elijo otro destino…


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