Los pueblos más bonitos de Burgos se encuentran repartidos por toda esta provincia castellana. En ella, no hay una zona de mayor belleza que otra. Dicho de otro modo, toda la provincia es una maravilla de viñedos, paisajes y localidades de origen medieval con grandes monumentos.
Por ella pasa el Camino de Santiago y cuenta con zonas como Las Merindades que son en sí mismas una auténtica maravilla patrimonial. Pero también hay en la provincia castellana localidades como Aranda de Duero o Miranda de Ebro con mucha pujanza económica y no pocos monumentos. Todo ello sin mencionarte la capital, una de las ciudades históricas por excelencia de España. Por todo ello, vamos a mostrarte algunos de los pueblos más bonitos de Burgos.
Lerma, en la vega del Arlanza
Dominando desde un altozano la vega del río Arlanza encontrarás la villa ducal de Lerma, que es conjunto histórico artístico. No en balde, posee un patrimonio monumental de primer orden. Para acceder a su casco antiguo debes atravesar el arco o puerta de la Cárcel, vestigio de su muralla medieval.
Siguiendo una calle empinada, llegarás a la preciosa plaza Mayor, que tiene grandes dimensiones (7000 metros cuadrados) y que está cerrada por dos alas porticadas. Ya es un monumento en sí misma, pero además cuenta con dos edificios espectaculares.
El primero es el Palacio Ducal, construido a principios del siglo XVII por orden del duque de Lerma. Es una maravilla de estilo herreriano con cuatro fachadas y un patio interior sustentado por columnas que forman arcos de medio punto. Actualmente, es sede del parador de turismo, así que podrás pernoctar en él.
Por su parte, el segundo es el monasterio de San Blas, también construido en el XVII por Francisco de Mora, el mismo arquitecto que hizo el palacio. No es, ni mucho menos, el único cenobio que puedes visitar en Lerma. También debes conocer el de la Madre de Dios y el de la Ascensión de Nuestro Señor, así como los conventos de Santa Teresa, San Francisco de los Reyes y la colegiata de San Pedro, esta última con un precioso retablo barroco de Juan de Ávila.
Covarrubias, otro de los pueblos más bonitos de Burgos
Otra maravilla burgalesa es esta localidad igualmente ubicada en la comarca del Arlanza. Te dará idea de su importancia histórica el hecho de que se la conoce como «la cuna de Castilla». Esto se debe a que, ya en el siglo X, el conde Fernán González la convirtió en capital del Infantado de Covarrubias.
También declarado conjunto histórico artístico, destaca en este pueblo su casco histórico medieval de casas tradicionales, como la de doña Sancha, y perfectamente conservado. Lo enmarcan restos de sus espectaculares murallas en las que puedes ver el torreón de Fernán González, construido con fines defensivos en el siglo X con arreglo a los cánones del estilo mozárabe. Es conocido igualmente como la torre de la Emparedada porque, según la leyenda, en él estuvo encerrada doña Urraca, hija del conde.
Pero Covarrubias cuenta con otros edificios de interés que te aconsejamos visitar. También es muy bonita la Colegiata de San Cosme y San Damián, construida en el siglo XV. Consta de tres naves, cuatro capillas con altares barrocos, un precioso claustro, un órgano del XVII que aún suena y un pequeño museo.
Por su parte, la iglesia parroquial de Santo Tomás fue edificada en el siglo XV sobre los restos de otro templo del XII. En ella destacan su espectacular vidriera renacentista, su colección de retablos y su pila de bautismo románica. Pero, sobre todo, su escalera de estilo plateresco.
Más curiosa te resultará la ermita de San Olav, construida hace pocos años y ubicada a tres kilómetros de la villa. Es de chapa negra y madera y, vista desde arriba, parece un casco vikingo. Pero, sobre todo, es peculiar el motivo de su edificación. Se hizo para homenajear a la princesa Kristina de Noruega, quien se casó con un hermano de Alfonso X el Sabio hace casi ochocientos años y que sigue enterrada en la localidad burgalesa.
En cuanto a los monumentos civiles de Covarrubias, debemos mencionarte el Archivo del Adelantamiento de Castilla, un edificio herreriano en forma de prisma sustentado por ocho contrafuertes, la casa del obispo Peña y el palacio de Fernán González, actual Ayuntamiento de la villa.
Frías, en Las Merindades
En realidad, deberías hablarte de ciudad, puesto que Frías ostenta esta categoría, aunque solo tiene 254 habitantes. De hecho, es la más pequeña de España de cuantas tienen ese título. Se encuentra sobre el cerro de La Muela, próxima al río Ebro y forma parte de la comarca de Las Merindades, a la que antes aludíamos.
Todavía conserva su trazado urbano medieval con casas que van adosándose entre sí y está dominada por el castillo de los Velasco, edificado a finales del siglo XII y muy bien conservado. Es uno de los más espectaculares entre los muchos que puedes visitar en Castilla y, a su entrada, puedes ver la casa cuartel y palacio de los Salazar.
Por otra parte, igual que sucede en Cuenca, también Frías tiene sus casas colgadas, que comparten el límite de la localidad con las antiguas murallas, de las que aún quedan dos puertas: la del Postigo y la de Medina. Más antigua es la calzada romana, una de las que comunicaba la meseta con el norte de la península.
Pero más espectacular aún es el puente medieval de Frías, con sus 143 metros de longitud y sus 9 arcos. Es románico y, ya en el siglo XIV, se le añadió una torre defensiva con almenas y matacanes. Por otra parte, la localidad burgalesa tuvo una importante judería, cuyos restos puedes ver entre las calles Convenio y Virgen de la Candonga.
Finalmente, debes visitar en la localidad burgalesa varias construcciones religiosas. Así, la preciosa iglesia de San Vicente Mártir y San Sebastián, también románica, aunque fue reconstruida a principios del siglo XX; la iglesia gótica de San Vítores y los conventos de Santa María de Vadillo y San Francisco.
Puentedey, la naturaleza de los pueblos más bonitos de Burgos
También ubicado en la comarca de las Merindades, en este caso su belleza se debe más a la naturaleza de la zona que a sus monumentos, si bien los tiene igualmente. Porque Puentedey está construido sobre una enorme roca horadada por el río Nela. Y, asimismo, las montañas que la circundan te ofrecen maravillosos cañones y cascadas como la de la Mea.
Volviendo a sus monumentos, destacan dos. El primero es la casa y palacio de los Brizuela, construida a finales del siglo XV y dotada con dos espectaculares torres. En cuanto al segundo, se trata de la iglesia románica de San Pelayo, con un precioso retablo mayor renacentista y una talla de San Jorge luchando contra el dragón en su portada.
Peñaranda de Duero
Es otra joya medieval entre los pueblos más bonitos de Burgos, con su típica plaza Mayor de casas tradicionales. Dominada por su castillo del siglo X, que mandó construir Fernán González, aunque reformado en el XV, Peñaranda tiene otra peculiaridad. Se trata de una botica del siglo XVII que, si bien sigue en funcionamiento, cuenta con un museo.
Por su parte, la iglesia de Santa Ana es una antigua colegiata edificada en el XVII. Posee una espectacular portada barroca donde, además, puedes ver tres bustos romanos de la ciudad de Clunia, que en tiempos latinos fue una de las más importantes del norte de Hispania. En cambio, su retablo es neoclásico.
Finalmente, no menos espectacular es el palacio de los condes de Miranda, una construcción renacentista del siglo XVI. En su interior, cuenta con un patio con galería doble. Pero, sobre todo, si puedes, visita sus habitaciones nobles, que poseen magníficos artesonados. Asimismo, muy cerca del palacio está el rollo de justicia, que presenta unas elegantes líneas góticas.
Orbaneja del Castillo, otra naturaleza espectacular
También Orbaneja destaca entre los pueblos más bonitos de Burgos por la impresionante naturaleza que la circunda. Para empezar, desde su mismo centro urbano sale una cascada de casi veinticinco metros de altura. Asimismo, desde su parte alta, puedes apreciar un imponente circo rocoso que se asemeja a un conjunto de torreones naturales.
Todo ello sin olvidar las cuevas del Agua y del Azar, esta última con pinturas rupestres, así como sus pozas de color azul turquesa. Entre ellas, la de Covanera, justamente una de las cuevas subacuáticas más largas del mundo.
Al lado de todas estas maravillas naturales, Orbaneja es un pueblo medieval que ha sido declarado conjunto histórico artístico. Y, en la parte de las Eras, puedes ver antiguas chozas de piedra que servían como granero.
En conclusión, te hemos mostrado algunos de los pueblos más bonitos de Burgos. Pero, inevitablemente, se nos han quedado otros en el tintero. Por ejemplo, no queremos dejar de mencionarte Caleruega, con el imponente conjunto monumental de Santo Domingo; Tobera, también con cascadas que recorren la villa; Medina de Pomar, con su impresionante Alcázar, una de las fortalezas más grandes de toda la provincia burgalesa, o Santo Domingo de Silos, con su maravilloso monasterio ligado a la leyenda del Cid Campeador. ¿No te parecen razones suficientes para planificar un viaje por los territorios de Burgos?