Qué ropa llevar al monasterio de Piedra

Monasterio de Piedra

Hablarte de qué ropa llevar al monasterio de Piedra precisa una explicación previa. Cuando planteamos esta pregunta, no nos referimos a la mera visita cultural a este precioso cenobio fundado por la orden del Císter en el año 1194.

Ir al monasterio de Piedra también supone recorrer el parque o jardín histórico que lo circunda y del que te hablaremos más adelante. Es decir, realizar una ruta de, aproximadamente, cuatro kilómetros por la naturaleza. Y esto afecta, no solo a la indumentaria que debes llevar, sino también al calzado. Por ello, vamos a explicarte qué ropa llevar al monasterio de Piedra y luego te mostraremos todo lo que debes saber para visitar este lugar maravilloso.

Clima y comodidad: qué ropa llevar al monasterio de Piedra

El cenobio de Piedra

El monasterio de Piedra

Dos factores son los más importantes a la hora de elegir qué ropa llevar al monasterio de Piedra. El primero es la climatología. El cenobio se halla en la comarca de Calatayud, en el término municipal de Nuévalos. Por tanto, está al sur de la provincia de Zaragoza.

Toda esta presenta un clima continental. Esto significa que las diferencias de temperaturas entre el invierno y el verano son muy grandes. Los primeros suelen ser muy fríos, con muchos días por debajo de los cero grados centígrados. En cambio, el estío suele ser muy caluroso, superando muchas veces los treinta sobre cero.

Parte de la culpa de ello la tienen vientos como el cierzo, que algunas veces supera los cien kilómetros por hora y es frío. En cambio, las lluvias son escasas e irregulares. El clima de la zona del monasterio de Piedra se debe a que se halla en el interior y cercano a grandes cadenas montañosas. En su caso, sobre todo los Pirineos al norte, pero también el Sistema Ibérico al sur.

Por tanto, si vas a ir al monasterio de Piedra en invierno, tendrás que llevar ropa de abrigo. Debes tener en cuenta, además, que se halla a una altura de más de ochocientos metros sobre el nivel del mar y ello intensifica el frío. Pero esa misma altitud también influye a la hora de hacer calor en verano. En consecuencia, si lo visitas en la estación calurosa, deberías llevar prendas frescas.

En cuanto al calzado, es un elemento muy importante. Como te decíamos, la visita al monasterio incluye un recorrido por su magnífico parque. Es una ruta de unos cuatro kilómetros por caminos, puentes e incluso escaleras que tiene una dificultad media-baja. No obstante, necesitarás un calzado cómodo para hacerlo. Por tanto, debes llevar unas deportivas o unos playeros en verano, mientras que, en invierno, serían mejor unas botas de senderismo. Pero, una vez te hemos explicado qué ropa llevar al monasterio de Piedra, vamos a hablarte de lo que vas a encontrarte en este maravilloso lugar.

El monasterio de Piedra: qué ver y hacer

Claustro de Piedra

El magnífico claustro primitivo del monasterio de Piedra

Este cenobio cisterciense consta de tres partes: el citado parque, el hotel y el monasterio propiamente dicho. A continuación, te hablaremos detalladamente del primero y del tercero, pero también debemos hacerlo del hotel. Si te alojas en él, sentirás algo especial, ya que se encuentra dentro del propio monasterio del siglo XIII.

Por tanto, te encontrarás como los antiguos monjes del Císter que lo habitaron en el pasado, pero disfrutando de comodidades que ellos nunca soñaron. Por ejemplo, un completo spa, salones de descanso, restaurantes, bares e incluso jardines con terrazas.

El hotel se encuentra en el llamado claustro nuevo, edificado en el siglo XVII. La entrada está en su patio, en la plaza de San Martín e inmediatamente accederás a la espectacular escalera de estilo renacentistas. Concebida por tramos, sus peldaños tienen poca altura y la protege una barandilla de hierro forjado. Pero esto nos lleva a hablarte del monasterio como edificación monumental.

El monasterio, una maravilla monumental

Sala capitular de Piedra

La preciosa sala capitular del monasterio de Piedra

La construcción de este cenobio se inició a finales del siglo XII para culminarse en la siguiente centuria. Por tanto, eran los años de transición del románico al gótico. Pero responde más a este último. Concretamente, al llamado gótico cisterciense por ser el característico de la orden que fundó el monasterio. Este se caracteriza por ser más austero, sobrio y luminoso que el clásico.

No obstante, posteriormente, se le añadieron elementos renacentistas e incluso barrocos. El monasterio se encuentra dentro de un recinto amurallado. Accederás a él por la torre medieval del homenaje, de estilo mudéjar, y la iglesia, que se encuentra en ruinas. Esta comunica con el claustro, que lleva a otras dependencias como la sala capitular, la cillería o almacén, la cocina, el refectorio o comedor y el calefactorio.

La iglesia respondía, sin embargo, al románico, con planta de cruz latina, crucero y ábside poligonal. Entre sus restos, destaca un pórtico tardorrománico que consta de arco de medio punto con cinco arquivoltas abocinadas que se apoyan en columnas con capiteles. Por su parte, el claustro primitivo destaca por sus arcos apuntados y sus capiteles ornados con decoración vegetal. Tiene planta cuadrada y en sus lados se distribuyen las otras estancias del monasterio. Asimismo, paralela a una de sus galerías está la llamada Callejuela Negra, que se cree perteneciente a un castillo previo al cenobio.

Pero una de las estancias más bonitas de Piedra es la sala capitular, que era el centro de la vida de los monjes. Destaca su portada central, su cerramiento sustentado por cuatro columnas palmeadas y sus ventanas laterales. Asimismo, en el refectorio tienes un precioso tríptico relicario. Finalmente, debes ver en el monasterio la sala de carruajes y, sobre todo, dos museos. Uno es el dedicado al vino de la Denominación de Origen Calatayud y el otro el que muestra la historia del chocolate en la cocina del cenobio. Tras disfrutar de estas maravillas, aún te queda recorrer el no menos espectacular parque.

El parque del monasterio

Lago del Espejo

Lago del Espejo, uno de los lugares más bonitos del parque del monasterio de Piedra

Lo primero que debemos decirte es que, si bien aprovecha los maravillosos alrededores del cenobio, fue diseñado por el escritor y poeta Juan Federico Muntadas, quien vivió sus últimos tiempos en el propio monasterio. Aprovechó para ello el curso del río Piedra, que pasa por los terrenos cercanos y que forma en la zona varias cascadas.

Entre estas, destacan las de los Baños de Diana, de los Fresnos Altos y Bajos, de los Chorreaderos o de la Fuente del Señor. Pero dos son las más famosas. Se trata, por una parte, de la llamada Cola de Caballo, que tiene más de cincuenta metros de altura. Y, por otra, de la cascada de La Caprichosa, a la que, desde el siglo XIV, se atribuyen propiedades milagrosas. Incluso hay una leyenda sobre ella. Dice que, como el Destino es voluble, quien le pida un favor, verá cumplido su deseo.

Junto a ellas, hay lagos como el Espejo y el de los Patos, así como numerosas grutas que fueron descubiertas por el propio Muntadas. Entre estas, las de la Pantera, la Bacante, el Artista, Iris o la Carmela. Otro elemento importante es la elevación de la Peña del Diablo y también cuenta el parque con un jardín denominado el Vergel de Juan Federico Muntadas. Bares, zonas de descanso y miradores completan esta maravilla natural.

Asimismo, últimamente, vienen haciéndose espectáculos con aves rapaces de la zona como águilas, buitres o búhos. Finalmente, a modo de anécdota, te diremos que en su seno se fundó hace ciento cincuenta años la primera piscifactoría de España. Para acceder al parque tendrás que sacar una entrada. No obstante, con ella podrás salir y volver a entrar todas las veces que quieras. Por ejemplo, para comer, ya que no se permite introducir alimentos. Precisamente, en la zona de acceso tienes restaurantes e incluso una zona de juegos infantil.

Nuévalos, complemento perfecto a tu visita a Piedra

Torre de Nuévalos

La torre del castillo de Nuévalos

Ya te hemos explicado qué ropa llevar al monasterio de Piedra y también todo lo que puedes ver en este maravilloso lugar. Pero, como complemento a tu visita, te aconsejamos que te acerques a la localidad de Nuévalos, en cuyo término municipal se halla el cenobio.

Esta pequeña villa de unos trescientos habitantes cuenta con varios monumentos. Restos de su castillo medieval, ubicado sobre un cerro, son las murallas y, sobre todo, la torre del homenaje, del siglo XIV. Igualmente elevada sobre un risco está la iglesia de San Julián, de estilo románico. Y cerca tienes el palacio de los Comendadores, construido en el XVII y, actualmente, destinado a Ayuntamiento.

Asimismo, ya en las afueras tienes varias ermitas. La de San Sebastián fue construida en el siglo XIV y responde al gótico tardío. También están las del Cristo del Valle y de Nuestra Señora de los Alvares. Por su parte, la de los Diegos, actualmente en ruinas, fue un precioso templo mudéjar. Igualmente, en el extrarradio del pueblo están las salinas de Nuévalos, cuya explotación comenzó en el siglo XIII, y el embalse de la Tranquera, que tiene gran valor ecológico.

En conclusión, te hemos explicado qué ropa llevar al monasterio de Piedra. Pero también te hemos hablado de todo lo que te ofrece esta maravilla situada en la provincia de Zaragoza. Incluso te hemos contado qué puedes ver en los alrededores. Respecto a estos, también te recomendamos que te acerques a la histórica Calatayud, la Bílbilis romana, que se halla a unos treinta kilómetros. Tan solo nos queda animarte a que visites esta zona y disfrutes de todo lo que te brinda.


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