¿Te has preguntado qué ver en Priego de Córdoba? En tal caso te diremos que esta localidad situada en la comarca de la Subbética también se conoce como «la joya del barroco cordobés» por la cantidad de monumentos de este estilo que posee.
Igualmente, se la ha bautizado como «ciudad del agua» por la gran cantidad de fuentes, casi todas monumentales, con que cuenta. Su importancia se remonta a la época del Califato de Córdoba, cuando fue capital de una de sus coras o provincias. Ya en el siglo XVI experimentó una gran bonanza amparada por la Casa de Aguilar. Pero sus tiempos de mayor esplendor coinciden con el XVIII gracias al negocio de la seda (de ahí el gran número de construcciones barrocas que te mencionábamos). Hoy, la villa cuenta con más de veinte mil habitantes y mucho que ofrecerte. Por ello, vamos a mostrarte qué ver en Priego de Córdoba.
Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción y otros templos
Patio interior del Hospital de San Juan de Dios
Comenzamos nuestro recorrido por los monumentos religiosos. Entre ellos, destaca la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, una construcción gótica-mudéjar, aunque su diseño es barroco. A este último estilo pertenece, igualmente, el precioso Sagrario, mientras que el retablo mayor es renacentista.
También barrocas, aunque de transición al neoclásico, son las iglesias de Nuestra Señora del Carmen, de San Pedro, de Nuestra Señora de las Mercedes y del Hospital de San Juan de Dios. En cambio, las de Nuestra Señora de las Angustias y de Nuestra Señora de la Aurora se inscriben en el ornamentado rococó.
Completan el patrimonio religioso de Priego ermitas como las del Calvario y de Nuestra Señora de Belén; capillas como las de la Milagrosa, San José o la Macarena e iglesias como la de la Virgen de la Cabeza y la de la Santísima Trinidad.
El castillo de Priego
Torre del homenaje del castillo, uno de los monumentos imprescindibles que ver en Priego de Córdoba
Continuamos nuestro recorrido por lo que ver en Priego de Córdoba deteniéndonos en su castillo. Es una antigua fortaleza árabe que fue ampliamente reformada en los siglos XIII y XIV. Debido a su finalidad militar, presenta un estilo robusto y austero. Lo conforma un perímetro amurallado con cinco torres cuadrangulares y una cilíndrica.
El acceso principal está formado por un corredor con dos arcos de herradura y portón al exterior. También cuenta con una torre del Homenaje o Torre Gorda, que es monumento histórico artístico desde 1943 y que fue construida en el siglo XIII bajo mandato de la Orden de Calatrava, entonces dominadora de Priego. Tiene unos treinta metros de altura y tres pisos cubiertos mediante bóveda de cañón. El más alto, que era el utilizado como vivienda, destaca por sus ventanas típicamente nazaríes, con sus dobles arcos de herradura y columnas terminadas en capiteles.
Los otros dos pisos se usaban, respectivamente, como aljibe y como almacén de grano. En cualquier caso, el castillo ha sido profundamente restaurado a principios de este milenio, por lo que te sorprenderá su magnífico estado.
Barrio de la Villa, otra joya que ver en Priego de Córdoba
Detalle del barrio de la Villa
Junto al castillo y limítrofe con el Balcón del Adarve, del que te hablaremos a continuación, tienes el barrio de la Villa. De estructura árabe medieval, comparte similitudes con otros de su época como la Judería de Córdoba o el Albaicín de Granada. Sus calles son estrechas y sinuosas, con casas blancas adornadas con flores. Justamente durante la festividad del Corpus Christi, se engalanan sus suelos y paredes con mosaicos de flores.
El propio Ayuntamiento de Priego aconseja un recorrido por La Villa, que es conjunto histórico artístico desde 1972. Este parte de la plaza Santa Ana, sigue por la calle Real hasta la coqueta plaza de San Antonio. Luego pasa por la calle Jazmines para atravesar de nuevo la Real y salir al Balcón de Adarve.
Este es un mirador situado a unos cincuenta y cinco metros de altura desde el que puedes apreciar unas vistas espectaculares de la campiña cordobesa, con sus huertas y olivos e incluso con sus lejanas sierras. Además, en la línea de lo que te decíamos al principio respecto a los sobrenombres de Priego, posee tres fuentes.
Las Carnicerías Reales
Patio central de las Carnicerías Reales
Así se denomina al antiguo matadero de reses y mercado de la localidad cordobesa. Fue construido a fines del siglo XVI por el arquitecto jienense Francisco del Castillo «el Mozo». Acorde con su tiempo, presenta una fachada manierista con columnas y frontón de indudable ascendencia italiana.
La planta del edificio es cuadrada, con un bello patio central organizado con galerías de arcos de medio punto que se asientan sobre columnas rústicas de piedra. También hay torres en sus ángulos. Y una escalera en forma espiral comunica el bajo con la planta inferior, que era la destinada al sacrificio de los animales.
El Recreo de Castilla o Huerto de las Infantas
Vista del Huerto de las Infantas o Recreo de Castilla
Recibe tan poético nombre un jardín que se halla justo al borde de la muralla del Adarve, que ya te hemos mencionado. Está fechado en torno a 1550. Pero sería a mediados del siglo XIX cuando, tras ser comprada la huerta por don Antonio Castilla, se convertiría en un jardín de estilo romántico. De ahí su otro nombre de Recreo de Castilla.
Posteriormente, fue utilizado para festivales de música y danza para caer en el abandono a finales del siglo XX. No obstante, a principios del XXI, comenzó su restauración. Se hizo una conexión con la calle Santiago mediante escaleras y ascensor. Pero, sobre todo, se recuperaron sus canales de agua, sus acequias y su estanque. Incluso se abrió el edificio de La Quinta, que era la vivienda que usaba la familia Castilla. Actualmente, alberga un interesante Museo del Textil que repasa la historia de esta actividad en Priego.
Te aconsejamos encarecidamente que visites el Recreo de Castilla porque, además de ser muy bonito, según el geógrafo Ángel Luis Vera, está lleno de historias y leyendas de pasadizos secretos e incluso de tesoros escondidos.
La del Rey y otras fuentes
La preciosa Fuente del Rey
Ya te hemos dicho que Priego es llamada la «ciudad del agua» por su gran número de fuentes. Por ejemplo, tienes tres en el Balcón del Adarve. Pero quizá la más bonita de todas ellas sea la Fuente del Rey. Su construcción se inició en el siglo XVI, pero la forma actual es la creada en el XIX. Su responsable fue Remigio Mármol, quien le confirió un estilo neobarroco.
La integran tres estanques a diferentes niveles y de formas curvas. En el primero, puedes ver una escultura que representa a un león luchando contra una serpiente y que se atribuye a Álvarez Cubero. Por su parte, en el segundo hay otra del propio Mármol que representa a Neptuno y Anfítrite sobre un carro que sale del agua. Desde él cae agua al tercer estanque el cual la lleva hasta el llamado Mascarón del Clero por donde sale. De esta fuente, que es monumento nacional, manan 139 caños y muchos de ellos están adornados con fantasmagóricas efigies de piedra.
Por otra parte, en este mismo recinto tienes la Fuente de la Salud, construida por el ya citado Francisco del Castillo en el siglo XVI. Destaca en ella su frontispicio de estilo manierista. Sobre las rocas donde está el manantial, hay esculturas de los propios Neptuno y Anfítrite, así como de la Medusa. Finalmente, en el centro de la fuente verás una hornacina con la imagen de la Virgen de la Cabeza.
Torres vigía y Arco de San Bernardo
Vista de Priego y sus alrededores, donde están las torres vigías
Las primeras son las construcciones más antiguas de esta localidad de la provincia de Córdoba. Fueron edificadas en el siglo XIV por los nazaríes para defenderse de los embates cristianos. Concretamente, se hicieron para proteger la villa de Priego, entonces fronteriza entre la Corona de Castilla y el propio Reino nazarí de Granada.
Todas ellas son parecidas y de factura sencilla. Tienen forma circular y están construidas en mampostería. Acaban en una terraza y permiten el contacto visual con el castillo de Priego. Asimismo, todas ostentan la categoría de bien de interés cultural.
Por su parte, el Arco de San Bernardo es una puerta fechada en el siglo XV que no pertenece a la antigua muralla, sino al acceso a un molino harinero. Se construyó en sillería de travertino y está conformado por un paso de bóveda de cañón sobre el que va un arco ojival ciego. Tiene gran valor patrimonial por ser el único resto de arquitectura civil medieval que queda dentro del casco urbano (las torres que te acabamos de mostrar se hallan a las afueras).
Los museos de Priego de Córdoba
Interior de la Casa Museo Alcalá Zamora
Finalmente, queremos hablarte de los museos de la villa cordobesa. Llama la atención el alto número de ellos que te ofrece. Ya te hemos mencionado el Textil, pero también son muy interesantes el habilitado en la Casa Natal de Niceto Alcalá Zamora, primer presidente de la Segunda República, que era de Priego, y el Museo del Paisaje Español Contemporáneo Antonio Povedano.
Por su parte, el Museo Histórico Municipal, ubicado en el Centro Cultural Adolfo Lozano, te muestra el rico patrimonio arqueológico del municipio. Y, ya en la cercana aldea de Castil de Campos, tienes el Museo de Artes y Costumbres Populares, de gran valor etnográfico. Asimismo, en la pedanía de Zamoranos está el Museo de la Almendra, donde puedes conocer cómo se trabajaba este fruto antiguamente. Y, por último, en Zagrilla, tienes el singular Jardín Micológico de la Trufa.
En conclusión, te hemos mostrado qué ver en Priego de Córdoba, una localidad con un gran patrimonio monumental. Pero, además, si la visitas, te aconsejamos que aproveches para acercarte también a la propia ciudad de Córdoba. No en balde, es la que cuenta con más títulos de patrimonio de la humanidad del mundo. ¿No te parece un viaje apasionante?