Sitios más bonitos de Portugal

Escoger los sitios más bonitos de Portugal para mostrártelos no es tarea fácil. Son tantos los lugares del país vecino que destacan por su hermosura que es difícil elegir unos pocos. De hecho, en todas las regiones hay varios.

Unos destacan por su impresionante naturaleza, con playas de arenas blancas o escarpadas montañas; otros por sus maravillosos monumentos llenos de historia. Incluso los hay que combinan ambas cosas y, además, les suman una excelente gastronomía. Por tanto, haciendo un esfuerzo de síntesis, a continuación, vamos a presentarte nuestra propuesta de los sitios más bonitos de Portugal.

Braga, la ciudad más antigua entre los sitios más bonitos de Portugal

Comenzando nuestro recorrido por el norte de Portugal, llegamos a Braga, que es la ciudad más antigua del país. La fundaron los romanos en el año 16 antes de Cristo con el nombre de Bracara Augusta. Por ello, no es de extrañar que conserve un buen patrimonio arqueológico y, sobre todo, numerosos monumentos.

Entre los religiosos, destaca la catedral o Sé, que data del siglo XI, aunque reformas posteriores añadieron a su estilo románico otros como el gótico, el manuelino y el barroco. Precisamente, a este último responde el impresionante santuario del Bom Jesús do Monte, declarado Patrimonio de la Humanidad. En cambio, el de Nuestra Señora de Sameiro, situado a las afueras de la ciudad, es neoclásico, igual que la iglesia do Pópulo, con su decoración interior de azulejos. En cambio, la de la Misericordia es renacentistas y la de la Santa Cruz barroca.

Respecto a la arquitectura civil de Braga, tienes que visitar su precioso casco histórico. Destacan en este el Arco da Porta Nova, un antigua acceso de la muralla medieval reformado en el siglo XVIII siguiendo rasgos barrocos. Y también es muy bonita la plaza de la República, con sus arcadas y edificios como el convento de los Congregados, la torre de Managem y la iglesia de Nuestra Señora de Lapa.

Por otra parte, junto al palacio episcopal tienes los preciosos jardines de Santa Bárbara y, muy cerca, la Casa do Raio. Se trata de un palacio rococó del XVII al que se añadió posteriormente la primorosa decoración con azulejos de su fachada. No menos bonito es el palacio de Biscainhos, de estilo barroco. Alberga el museo del mismo nombre, con piezas de arte de los siglos XVII y XVIII. Finalmente, a unos cinco kilómetros de la localidad, tienes el castillo de Dona China, envuelto en misterios. Y, junto a las antiguas termas romanas do Alto Cidade, otro museo, el Arqueológico Don Diogo de Sousa.

Oporto

Desde Braga viajamos ahora a Oporto, llamada «la ciudad de los Puentes» por los muchos que la comunican atravesando el río Duero. Son un total de seis: los de María Pía, das Barcas, de Don Luis I (que sustituyó al derribado Pensil), da Arrábida, do Infante y do Freixo.

Pero Oporto es también uno de los sitios más bonitos de Portugal. Tiene mucho más que ofrecerte, al margen de los puentes que también la comunican con la bonita zona de bodegas de Vila Nova de Gaia. Su casco histórico es Patrimonio de la Humanidad por el impresionante conjunto de monumentos que alberga.

Ante la imposibilidad de hablarte de todos ellos, te mencionaremos cuatro que están, sin duda, entre los más bonitos. El primero es la catedral de Oporto, construida entre los siglos XII y XIII siguiendo los cánones del románico primero y, posteriormente, del gótico. Asimismo, reformas posteriores le añadieron elementos barrocos. A estos pertenece el precioso altar mayor, cuya belleza realzan otros elementos del interior del templo. Por ejemplo, otro altar, en este caso de plata, y tres espectaculares órganos.

El segundo gran monumento del casco antiguo es la iglesia y torre de los Clérigos, obra del arquitecto barroco Nicolás Nasoni, quien también intervino en la catedral. Data del siglo XVIII y su elemento más destacado es, justamente, la esbelta torre de 76 metros de altura a la que puedes subir para observar preciosas vistas de la ciudad.

El palacio episcopal, que combina los estilos barroco y rococó, y el de la Bolsa, una imponente construcción neoclásica, completan los cuatro monumentos más destacados del casco histórico de Oporto. Pero estos son una pequeña parte de las maravillas que te ofrece esta preciosa ciudad de corte británico. También debes visitar iglesias como las de San Francisco, San Ildefonso o Santa Clara y capillas como las de las Almas, dos Alfaiates o del Senhor dos Passos. Asimismo, cuenta con numerosos palacetes como los de Cabido, del Infante y dos Maias y Fuentes como los chafarices da Colher y de San Miguel. Todo ello sin olvidar mercados como el de Ferreira y las murallas Fernandinas.

Coimbra, otra ciudad histórica

En nuestra ruta hacia el sur por los sitios más bonitos de Portugal llegamos ahora a Coimbra, que también cuenta con pasado romano. Así lo demuestran varios de sus espacios arqueológicos como los del acueducto y los de la ciudad de Conímbriga.

Pero su gran esplendor coincide con la Edad Media y el Renacimiento, cuando se convirtió en centro político y cultural del país, con la creación de su universidad. Esta, inaugurada en 1537 (aunque ya había un Estudio General en 1308), es la más antigua del mundo en lengua portuguesa. Justamente, sus edificios más veteranos, como la Biblioteca Joanina, son una de las maravillas monumentales de la ciudad.

Pero esta dispone de otras muchas. Entre las de tipo religioso están sus dos catedrales. La vieja data del siglo XII y es románica, mientras que la nueva, iniciada en el XVI, es no obstante marcadamente barroca. Por su parte, el monasterio de Santa Clara la Vieja, del siglo XIII, responde a un primitivo estilo gótico. En cambio, es románico el de Santa Cruz, convertido en panteón nacional al enterrarse allí a Don Alfonso Enriques y Don Sancho I, reyes que inauguraron la monarquía en Portugal.

Por otra parte, el centro neurálgico de Coimbra es la plaza del Comercio, a la que flanquea la iglesia de San Bartolomé. En ella, te recomendamos que tomes algo en el precioso café Santa Cruz. Y, si puedes, alójate en el Hotel Quinta das Lágrimas, ubicado en el palacio del mismo nombre, que guarda una triste historia. Fue escenario de los amores del infante don Pedro e Inés de Castro. Presionado por la corte y el pueblo, el rey ordenó matar a la joven. Entonces, don Pedro encabezó un ejército que devastó buena parte del país y ajustició a los asesinos. También cuenta la Quinta das Lágrimas con varias hectáreas arboladas. Pero, en este sentido, te aconsejamos que visites el Jardín Botánico, creado por el marqués de Pombal en 1773.

Lisboa y sus alrededores, entre los sitios más bonitos de Portugal

La capital del país vecino es uno de los sitios más bonitos de Portugal no solo por su belleza propia, sino también por la de sus alrededores. Lugares como Cascais o Estoril te ofrecen maravillosas playas y grandes monumentos. En el primero de ellos tienes arenales como el de la Ribeira y palacetes de verano como el de los condes de Castro Guimaraes o el de Seixas.

En cuanto a Estoril, junto a su magnífico paseo marítimo y a su famoso casino, tienes playas como las de Tamariz y Azarujinha y construcciones como el no menos emblemático chalé Barros.

Pero, volviendo a Lisboa, son muchos los monumentos que debes visitar. Uno de los grandes símbolos es el monasterio de los Jerónimos, joya del estilo manuelino edificada en el siglo XVI. Se complementa con la Torre de Belem formando un conjunto declarado Patrimonio de la Humanidad. Por su parte, en el típico barrio de Alfama tienes la catedral de Santa María la Mayor, que es románica, el castillo de San Jorge y la singular Casa dos Bicos.

En fin, resulta imposible enumerarte todo lo que puedes ver en Lisboa. Pero te hablaremos también de la plaza del Comercio, uno de sus centros neurálgicos. En ella tienes el imponente Arco Triunfal de Rúa Augusta y la estatua ecuestre del rey José I, obra en bronce de Machado de Castro.

Sintra, otra joya declarada Patrimonio de la Humanidad

Podríamos incluir también esta maravillosa población, declarada Patrimonio de la Humanidad, entre las de los alrededores de Lisboa, pues está a una media hora de la capital. Es un placer caminar por sus calles estrechas y empedradas jalonadas de casas de colores. También en el centro tienes el Palacio Nacional. Pero sus dos grandes monumentos se hallan en las afueras.

El primero es el Castelo dos Mouros, que la domina desde lo alto de la sierra de Sintra. Tuvo su origen en una primitiva fortaleza musulmana. Ya en torno al siglo XII se edificó el castillo cristiano tal como lo conocemos hoy. Por su parte, el segundo gran monumento de la localidad es el palacio da Pena, que constituye una de las mejores muestras del estilo romántico en Portugal. Se edificó en el siglo XIX sobre los restos de un antiguo monasterio como residencia de los reyes María y Fernando II.

Por si todo lo anterior fuera poco, Sintra cuenta con unos alrededores privilegiados. De hecho, se trata del municipio con más áreas protegidas de todo el Área Metropolitana de Lisboa. La más importante de ellas, que te ofrece paisajes maravillosos es el Parque Natural de Sintra Cascais.

El Alentejo y Évora

Continuamos nuestra ruta hacia el sur para mostrarte los sitios más bonitos de Portugal y llegamos a la región del Alentejo. En esta tienes las playas de la Costa Vicentina, consideradas entre las mejores de Europa. También tienes maravillosos paisajes de interior como los del Parque Natural del Suroeste Alentejano.

Pero, sobre todo, puedes visitar preciosas localidades como Alqueva, Monsaraz, Castelo de Vide o Sines. No obstante, dos de ellas están catalogadas como Patrimonio de la Humanidad. Se trata de Elvas y Évora. La primera es una preciosa villa de casas blancas y monumentos como el fuerte de Nuestra Señora de Gracia y la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción.

Por su parte, Évora tiene más de dos mil años de antigüedad y tanta belleza que se la denomina «ciudad-museo». En ella tienes que ver el templo romano de Diana y la torre coetánea de Sisebuto; la impresionante catedral que combina los estilos románico, gótico, manuelino y barroco; la iglesia de San Francisco con la Capilla de los Huesos y el convento dos Lóios. Pero también el palacio de don Manuel I, en el que destaca la Galería de las Damas, de estilo manuelino. Finalmente, en el palacio episcopal encontrarás el Museo Nacional Fray Manuel del Cenáculo.

El Algarve

Terminamos nuestro recorrido por los sitios más bonitos de Portugal hablándote de su zona meridional y turística por excelencia. Nos referimos a El Algarve, con sus maravillosas playas y clima cálido. Entre ellas, por ejemplo, tienes las de Doña Ana, los Estudiantes, Carvoeiro y dos Tres Irmaos. Asimismo, abundan en la zona paisajes de enorme belleza como la famosa cueva de Benagil.

En cuanto a las poblaciones, también tienen interesantes monumentos. Portimao destaca por su casco histórico, con la iglesia de Nuestra Señora de la Concepción, el Colegio de los Jesuitas y la Casa Manuel Teixeira Gomes. En Aljezur tienes un castillo del siglo X y en Lagos otro llamado de los Gobernadores y la preciosa iglesia de Santo Antonio. Por su parte, Silves tiene su propia catedral y Quarteira las ruinas romanas del cerro da Vila.

En conclusión, te hemos mostrado algunos de los sitios más bonitos de Portugal. Sin embargo, podríamos haber incluido otros como Guimaraes, cuyo centro histórico también está catalogado como Patrimonio de la Humanidad; Aveiro, denominado la Venecia portuguesa o la preciosa Nazaré. Anímate a descubrir estos maravillosos lugares del país vecino.