Visitar el Desierto del Namib

Nuestro planeta tiene paisajes hermosos y contrastantes por igual. Hay arrecifes coralinos, bosques tropicales, playas de ensueño, montañas que rasgan los cielos y desiertos inolvidables. Uno de estos desiertos es el Desierto del Namib, uno de los más importantes del continente africano.

Sí, puede visitarse, así que hoy te proponemos un viaje entre dunas, bajo el sol abrumador de día y bajo un océano de estrellas por la noche.

El Desierto del Namib

Este desierto, como dijimos uno de los más importantes de África, está en la frontera entre Namibia y Sudáfrica. Recorre 2 mil kilómetros a lo largo y su anchura puede variar entre 80 y 200 kilómetros. En kilómetros cuadrados tiene 81 mil, y su nombre significa precisamente enorme.

Algunos consideran que este desierto es el más antiguo del mundo, así que por lo menos estaba allí hace 65 millones de años, en la Era Terciaria. Podemos decir de él que se divide en dos grandes zonas climáticas a cada lado del trópico de Capricornio. Al sur las lluvias son un poco escasas, la temperatura es más baja y en invierno puede helar, mientras que en el norte suele llover más, mucho más en verano.

El límite del desierto es una cadena montañosa llamada Gran Escarpe. Mientras en el norte las cumbres están surcadas por numerosos ríos, en el sur las dunas son mayoría y se extienden para hacer del sitio un paisaje difícil de sortear. Del lado de la costa las aguas son frías y ricas en peces.

¿Cómo es la vida en el desierto del Namib? Pues la humedad, la presencia de nieblas por la costa, los valles y cañones y charcas hace que existan ciertas plantas y animales no tan frecuentes en zonas calificadas como desiertos. Por lo demás verás avestruces, hienas, caballos, chacales, cebras, elefantes, leones, antílopes o jirafas.

Visitar el Desierto del Namib

Desde 2013 el desierto es Patrimonio Mundial. Existe una zona que ha sido declarada Parque Nacional Namib, junto al mar, con 320 km de largo y unos 120 km de ancho. Contiene dunas de hasta 300 metros de altura. Hacia el centro del parque está Sossusvlei, una sitio con lagos que se forman cuando llueve. Algunos hace siglos que están vacíos y forman un paisaje raro con fondos blancos y dunas color rojizo alrededor. Pero cuando llueve los que se llenan de agua atraen vida y el espectáculo es maravilloso.

El desierto es precioso y aunque vayas en temporada alta puedes estar conduciendo el coche por horas sin cruzarte con nadie. Sí, para visitar este lugar puedes apuntarte a un tour o puedes ir por tu cuenta con un coche de alquiler que puedes recoger en el mismísimo Aeropuerto de Windhoek, la capital de Namibia que está a 40 minutos del aeropuerto. Desde aquí al parque son unas cinco horas por rutas de grava así que conviene una camioneta o una SUV para que la travesía sea confortable.

Además, el GPS puede no funcionar y lo mismo una tarjeta SIM local así que conviene descargar en el móvil un mapa off line. ¿Te estás preguntando si conducir un coche por las rutas de Namibia es seguro? Sí, incluso han viajado mujeres solas y lo recomiendan. Cualquiera, hombre o mujer, debe haber programado el recorrido por anticipado así que la ruta hacia el desierto dependerá un poco de dónde vayas a alojarte.

Muchos recomiendan Gondwana Lodges, especialmente si no te gusta acampar y quieres una experiencia un poco de lujo bajo las estrellas. Tiene bungalows con terraza propia, baño y piscina, hay solo diez, así que si te gusta lo que ves… ¡a reservar! Hasta aquí puedes llegar en coche y es un lugar genial porque estás en el mismo desierto, cual oasis. Para llegar hay que pasar por Sesriem, ya dentro del parque nacional, así que hay que pagar entrada.

Entonces, una vez con el coche hay que dejar Windhoek y aprestarse a pasar medio día en el coche. En ruta pasas por el letrero del Trópico de Capricornio y la foto es obligada. La primera hora discurre por una carretera asfaltada muy normal, la C26, pero después de unas horas hay que doblar a la derecha en la D1275 en dirección a Solitaire, ya por carretera de ripio pero rodeado de paisajes maravillosos.

Sobre esa ruta cruzamos el Paso Kupferberg hacia el paso Spreetschoogte y pasamos por Nauchas donde verás muchas granjas y una estación de policía. Llegamos al final a Solitaire pero hay que seguir unos 40 minutos más hasta llegar a Gondwana Lodges. Si eliges alojarte aquí es tu punto de partida para conocer el interior del desierto y sus maravillas, sino puedes buscar campamentos u otros lodges como We kebi Lodge, Le Mirage Hotel & Spa, Moon Montain Logde, etcétera.

Bien, lo siguiente es ir a conocer el área de Sossvlei y Deadvlei, la zona de lagos vivos y muertos, podríamos decir. Sí o sí hay que ir hasta Sesriem y eso significa conducir hora y media, dos horas desde Gondwana Lodges. Una vez allí, como dijimos más arriba, estamos dentro del Parque Nacional Namib – Naukluft así que hay que estacionar y pagar la entrada. Después, queda seguir el camino para toparse con la Duna 42 y la Duna 45.

Aquí hay que pagar sí o sí un servicio de jeep que nos llevará a los siguientes lugares, Deadvlei y Sossusvlei. ¿A qué hora conviene comenzar todo este viajecito? Pues bien temprano o bien tarde porque en el desierto el amanecer y el atardecer son los mejores momentos del día. Si eliges la mañana entonces te conviene estar en la Duna 42 a las 8 am para contemplar los mejores colores. Tanto la 42 como la Duna 45 son enormes, enormes, tal vez son las dunas mas grandes del mundo.

Una vez que ves las dunas tienes que coger el jeep. ¿Tienes un jeep 4 x4 alquilado? Pues puedes ir con el tuyo pero hay que saber conducir muy bien para no estancarse en la arena. ¿Para qué el esfuerzo? Pagamos al conductor y él nos lleva a cada uno de los lugares y nos recoge cuando queramos. Y finalmente, los lagos del Desierto del Namib.

A Deadvlei llegamos caminando tras 25 minutos de andar. Los lagos muertos son hermosos, de fondo blanco, con algunos árboles secos que se cree murieron hace 700 años. Imagina eso, dunas de 350 metros de alto, árboles de siete siglos… No en vano la han bautizado Big Dune. Después le toca el turno a Sossusvlei.

Estos dos destinos no puedes faltar pero no son los únicos. Incluso puedes observar el desierto desde el aire con un tour en avión a más o menos 450 euros por persona. Estos tours pueden durar 45 minutos u hora y media si el avión te lleva un poco más allá, hacia la Costa Esqueleto.

Unos últimos consejos para visitar el desierto del Namib: lleva botas porque la arena se mete en los zapatos bajos, la temporada alta es julio con excelentes condiciones climáticas, si haces la visita por la mañana también te conviene regresar en el atardecer, por lo menos para ver las dunas, comprueba los horarios de apertura del parque, lleva agua y sombrero.


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