Según la famosa editorial de guías de turismo, Lonely Planet, Sevilla fue reconocida como la mejor ciudad del mundo que visitar en 2018. Su riqueza histórica y cultural, su gastronomía y la calidez de sus gentes lo convierten en un destino imprescindible que conocer durante un viaje a España o una escapada.
Museo de Bellas Artes
Se trata del museo más importante de Sevilla y la segunda pinacoteca de España tras el Museo del Prado, con una valiosa colección de pintura de la escuela barroca (Zurbarán, Murillo y Valdés Leal), y exposiciones invitadas de gran relevancia. Fue fundado en 1835, con las obras procedentes de conventos y monasterios desamortizados por el gobierno liberal de Mendizábal. Se sitúa en la plaza del mismo nombre, ocupando el antiguo Convento de la Merced Calzada fundado en unos terrenos cedidos por Fernando III tras conquistar Sevilla.
En la capilla del museo de Bellas Artes de Sevilla encontramos uno de los Cristos más llamativos de la procesión de la Semana Santa de Sevilla. Los domingos abre, así que es un buen día para visitar el mercadillo de arte en la misma Plaza del Museo.
Torre del Oro
Si vas a pasear junto al Guadalquivir, seguramente llegarás a la popular Torre del Oro. Debe su nombre a los reflejos dorados que producían los azulejos que la recubrían en el siglo XIII. Con su altura de 36 metros cerraba el paso al Arenal mediante un tramo de muralla que la unía con la Torre de la Plata, que formaba parte de las murallas de Sevilla que defendían el Alcázar.
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Parque de María Luisa
Uno de los lugares más emblemáticos de Sevilla es el Parque de María Luisa. Recibe su nombre de la hija menor del rey Fernando VII, quien residió en la capital hispalense la mayor parte de su vida. Su esposo, el duque de Montpensier, vivía con ella en el Palacio de San Telmo y al morir, la infanta donó los terrenos del palacio a la ciudad. Fue inaugurado como Parque Público el 18 de abril de 1914 con el nombre de Parque Urbano Infanta María Luisa Fernanda.
Tras la reforma realizada por el ingeniero francés Jean-Claude Nicolas Fourestier, conservador del bosque de Boulogne en París, el Parque María Luisa adquirió un toque romántico inspirado en los jardines del Generalife, la Alhambra y los Alcázares de Sevilla.
Catedral de Sevilla
La de Sevilla es la catedral gótica más grande del mundo y el tercer templo cristiano tras San Pedro en Roma y San Pablo en Londres. Se edificó sobre los restos de una antigua mezquita tras conquistar la ciudad Fernando III de Castilla en el 1248 y se hizo en varias fases a lo largo de más de 500 años, dando lugar a la mezcla de varios estilos arqutectónicos que la dotan de una singular belleza.
La Catedral de Sevilla cuenta con 5 naves y 25 capillas, que contienen obras de algunos de los más célebres pintores españoles.
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Real Alcázar de Sevilla
El Real Alcázar de Sevilla fue ordenado construir como palacio-fortaleza por Abd Al Raman III durante la alta Edad Media. En la actualidad continúa siendo usado como lugar de alojamiento, especialmente por miembros de la Casa Real Española. Este conjunto arquitectónico está rodeado por murallas y su ornamentación destaca por sus diversos estilos arquitectónicos como el islámico, el mudéjar, el gótico, el renacentista y el barroco. No hay que olvidar un elemento fundamental como son sus bellos jardines.