Tombuctú

Imagen|El Confidencial

A medio camino entre la sabana africana y el desierto del Sáhara, en una zona denominada Sahel a 7 kilómetros del río Niger, se ubica Tombuctú la que ha sido capital del pueblo Tuareg durante años en la república de Malí.

Conocida como «la Atenas africana», su ubicación geográfica la convierte en un punto de encuentro entre África Occidental y las poblaciones nómadas bereberes, siendo un enclave histórico de la ruta comercial transahariana, así como la capital espiritual del Islam en toda África durante los siglos XV y XVI. Esta ciudad es Patrimonio de la Humanidad y no es para menos. Acompáñanos a descubrirla.

Hace un lustro, Tombuctú tuvo la desgracia de caer en manos de yihadistas que arrasaron con la ciudad y obligaron a sus habitantes a huir. Paulatinamente las aguas regresaron a su cauce y la paz volvió al norte de Malí para suerte de los lugareños y los turistas, quienes ahora pueden volver a asombrarse con la preciosa ciudad de adobe y barro de Tombuctú, una de las más hermosas del mundo en su estilo. Algunos de los lugares más emblemáticos para conocer aquí son la mezquita de Djingareyber o la mezquita de Sidi Yahya.

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Mezquita de Sidi Yahya

Se trata de un templo y madraza en Tombuctú, cuya construcción se inició por deseo del jeque El-Mokhtar Hamalla. Tardó 40 años en completarse y se convirtió en un gran centro de aprendizaje para la región.

En el año 2012 los rebeldes islamistas del grupo Ansar Dine de Mali destrozaron la puerta de la mezquita desafiando así las creencias de la población de que esa puerta debería permanecer cerrada hasta el fin del mundo.

Mezquita de Sankore

La Mezquita de Sankore o la Madrasa de Sankore es el más antiguo de los tres centros de aprendizaje ubicados en Tombuctú.

Imagen| El Periódico

Mezquita de Djingareyber

La Mezquita de Djingareyber es un famoso centro de aprendizaje de Malí construido en 1327 por el poeta andalusí  Abu Haq Es Saheli. Djinguereber es una de los tres madrazas que componen la Universidad de Sankore y en su construcción se emplearon materiales orgánicos tales como tierra, fibras, paja y madera. Fue inscrita en la lista del Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1988 junto a la mezquita Sidi Yahya y a la mezquita de Sankore. Esta es la única mezquita a la que pueden acceder los visitantes no musulmanes en Tombuctú.

Otros espacios de Tombuctú

Pese a que se conservan en pie pocos restos del reflejo de su historia a causa de la desertización y del terrorismo yihadista, aún quedan otros puntos de gran interés como la muralla, el centro de estudios Ahmed Baba, el palacio Buctú, las casas de los exploradores o el mueso privado Almansour Korey.

A raíz de su declaración como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1988 se han desarrollado programas para conservar y proteger la ciudad del avance de las arenas del desierto. Sin embargo, la inestabilidad política y religiosa del país ha llevado a la destrucción de templos y otras estructuras.


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