Visitar el Lago di Como

Si hay un paisaje lacustre hermoso en Italia, ése es el Lago di Como. Aquí se combina un poco de todo: una bella naturaleza, elegancia, nobleza y jet-set internacional. Claro, aquí tiene una casa George Clooney pero además muchas familias nobles de Italia o Suiza.

Realmente hay que conocer el Lago di Como, así que si planeas un futuro viaje a Italia puedes darte una vuelta por el lago y toda la hermosa provincia de Como y su vecina, Lecco. Veamos qué actividades, lugares y rincones debemos visitar.

Lago di Como

El lago está en la provincia de Como, en la región de Candela, Italia, a casi 200 metros de altitud. Tiene una superficie de 146 kilómetros cuadrados y poco más de 400 metros de profundidad. Así, es un lago realmente profundo y es el tercer lago más grande del país.

El lago tiene tres brazos: Como, Lecco y Colico. A su vez, el brazo Como tiene otras tres partes y la primera corresponde a la ciudad de Como. En uno de esos brazos descansa la pintoresca Isla Comacina, la única que tiene el lago y que guarda ruinas romanas. Hay muchos pueblos a orilla del lago y algunas casas elegantes y millonarias pertenecen a artistas del mundo como el que nombré, Clooney, o mismo Madonna.

Estos nombres son contemporáneos, pero la belleza del lago es histórica así que personajes históricos también se han enamorado del paisaje: Bonaparte, Verdi, Winston Churchill, Da Vinci... Y por supuesto, se han filmado incontables películas y series de TV.

Turismo en el Lago di Como

Podemos comenzar por el brazo de Como, por sus ciudades. Como es un destino divino, con la Plaza de la Catedral, imponente edificio, la Torre Municipal o el Broletto. La catedral es de estilo gótico y tiene obras de arte por doquier. Data de fines del siglo XIV aunque fue concluida recién a mediados del siglo XVIII.

Desde Como uno puede tomar un crucero para ir a conocer las aldeas costeras, por ejemplo, la famosa Bellagio con sus jardines y sus villas, tan famosas en todo el mundo: Villa Este o Villa Olmo, hoy hoteles de cinco estrellas. Si vas en primavera o verano puede ser que prefieras caminar así que puedes hacerlo por los hermosos parques de Como. El más grande es el Parco Spina o el Parco Sovraccomunales Brughiera Briantea de 23 mil hectáreas.

Si al contrario te gusta el arte y la cultura entonces hay algunos museos interesantes. Como tiene cuatro museos municipales y otros privados de diversas colecciones. Entre los primeros está el Museo Arqueológico, el Museo Garibaldi de historia, la Pinacoteca Civica y el Museo Tempio Voltiano que está dedicado al conocido escritor Alessandro Volta. También, interesante, está el Museo de Seda de Como.

Durante todo el año hay eventos diversos y especialmente hermosos son los mercados donde hay antigüedades, muebles y ropa de todos los tiempos. También hay antiguas termas romanas, de hecho, el legado romano está presente en la propia ciudad y en sus alrededores. El clima templado y tan agradable conquistó en su momento a Plinio el Joven, por ejemplo, así que los romanos acaudalados también se construyeron aquí sus casas de recreo.

A ellos les siguieron en los siglos siguientes las familias aristocráticas de Como y Milán así que hoy están las Villas Vigoni, Villa Salazar, La Gaeta, La Quiete, el Palacio Manzi, la villa D’Este… Todas mansiones históricas que guardan sus propias obras de arte. La cantidad de sitios que puedes ver en Como es increíble así que mi consejo es que hagas una buena investigación online para no perderte algo que te gusta y termines viendo algo que no es de tu interés.

El brazo de Lecco también tiene lo suyo, con los picos de Resegone y Grigna a la vista. Esta ciudad alpina tiene mucha identidad cultural y fue uno de los primeros centros industriales de Italia dedicado al hierro y acero, actividad que desarrolla desde el lejano siglo XII. Tiene un malecón hermoso y muy romántico y está cerca de aldeas costeras muy bonitas como, Varenna, Mandello o las pistas de esquí de Valsassina.

Varenna es una hermosa y pequeña aldea pesquera que está en la mitad del lago y que es famosa por sus antiguas minas de mármol negro y blanco y por la proximidad con el hermosísimo territorio de Brianza. Es un sitio de callejas estrechas que bajan hacia el lago y un malecón precioso, muchos le dicen simplemente «calle del amor». También hay cuatro iglesias antiguas, de distintos estilos y algunas villas elegantes hoy devenidas en selectos hoteles.

Desde Varenna, a su vez, puedes hacerte una escapada a Fiumelatte, llamada así por una suerte de espuma blanca que emerge de un manantial en una cueva y que en cierto momento del año deambula hacia el lago. También cerca está el Castillo de Vezio, en Esino Lario, con su torre medieval, hogar de la reina lombarda Teodolinda. Hoy está abierto al público y desde allí arriba las vistas del lago son algo digno de ver.

La aldea de Mandello, por su parte, está emplazada en las montañas y muchos de los que visitan Lecco la suman a la travesía.  Merece una visita  por la belleza alpina de sus paisajes, por sus playas y actividades acuáticas en temporada, por sus bares y restaurantes y por sus eventos musicales y de motocross.

Otros destinos posibles, con tiempo y organización, son el Valle de San Martino y el Valee d’Intelvi. El primero lo encontramos cuando el Lago di Como drena en el río Adda. Es un valle que está entre la zona de Milan y la República del Veneto, tierras hermosas, antiguas, repletas de historia y cultura. Tiene su propio lago, el Lago Garlate, rocas montañosas, verdes acantilados, el castillo Rossino, un viejo monasterio del siglo XVI con frescos del siglo XIV y mucho más.

Finalmente, una vez que organices bien qué ciudades o aldeas vas a conocer debes saber que también hay muchos paseos en bote que comienzan en Como y tocan sitios como Blevio, Tomo, Moltrasio y Cernobbio, que hay también recorridos naturales preciosos para hacer un día soleado, los Caminos de Vía Regina, por ejemplo, muy cultural,  y que el funicular en Brunate, del siglo XIX, te brinda las mejores vistas del lago y sus alrededores. No en vano, te lleva a lo que se conoce como «el balcón de los Alpes».


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