Cortes de Pallás

La pequeña localidad de Cortes de Pallás, capital del municipio homónimo, se encuentra en la provincia de Valencia. Más concretamente, pertenece a la comarca del valle de Ayora-Cofrentes, aunque está incluida en la Mancomunidad de la Hoya de Buñol-Chiva.

Habitada desde la Edad de Bronce, alcanzó importancia bajo dominio musulmán. De ese periodo y del posterior cristiano han quedado varios monumentos que te mostraremos. Pero también vamos a hablarte de su maravilloso entorno natural. Si quieres saber qué ver y hacer en Cortes de Pallás, te animamos a seguir leyendo.

El entorno natural de Cortes

El Ayuntamiento de esta localidad valenciana se anuncia con el eslogan «un paraíso a tu alcance». Y no le falta razón, porque tanto la orografía como los recursos hídricos de la zona te ofrecen maravillas naturales en las que puedes practicar un sinfín de deportes.

Domina la villa por el norte la Sierra Martés con el pico homónimo, de casi mil cien metros de altura. En el centro del municipio se halla la Muela de Albéitar y al sur se encuentra la Muela de Cortes, declarada coto de caza mayor. Por si esto fuera poco, el río Júcar corta el término municipal formando espectaculares cañones y dejando parte de sus aguas en dos embalses: los de El Naranjero y de Cortes-La Muela.

Precisamente, para ver esos cañones, puedes disfrutar de una ruta fluvial de catorce kilómetros. Recorrerás, a bordo de una moderna embarcación, el tramo del Júcar entre Cortes y Cofrentes. Tiene una duración de cuarenta y cinco minutos y verás espectaculares paisajes de taludes y barrancos. Así, el Remanso de Ral, el desfiladero de Cortes o el Cinto del Castillo.

Pero no es esta la única actividad que puedes realizar en el entorno de Cortes de Pallás. También te ofrece magníficas rutas de senderismo en un privilegiado espacio natural. Podemos mencionarte entre ellas la que va desde la Cruz del Collado al Pico del Carrascal con retorno por las Lomas de Santiago. Tiene una extensión de catorce kilómetros y un desnivel de casi quinientos metros. También está la ruta desde Cortes hasta El Corbinet pasando por la cueva El Tejedor y el manantial de San Vicente. En su caso, no llega a los seis kilómetros y, además, te ofrece varias zonas de baño.

Asimismo, la peculiar orografía del municipio te permite practicar la escalada, el barranquismo y la tirolina sobre agua. Incluso tienes una vía ferrata que puedes realizar acompañado de expertos. Por otra parte, en los embalses que te hemos mencionado anteriormente, tienes disponible la actividad de kayak.

Diferente es la Ruta de los Moriscos. Como te hemos dicho, los musulmanes bautizados como cristianos poblaron Cortes de Pallás hasta su expulsión en 1609. Por tanto, han dejado muchos vestigios de aquella época. Por eso, el Ayuntamiento de la localidad ha organizado una ruta que los recorre. Tiene una extensión de 16 kilómetros que se realizan en, aproximadamente, una hora porque hay varias paradas. Recorre, entre otros puntos, la aldea de El Oro, el paraje del Corbinet, el mirador de Tierra Colorá y la propia villa de Cortes.

Monumentos de Cortes de Pallás

La villa de Cortes es pequeña, pues cuenta con menos de ochocientos habitantes. Sin embargo, a pesar de ello, tiene un interesante patrimonio monumental en su casco urbano. También las aldeas que conforman su término municipal como La Cabezuela, Los Herreros, Venta Gaeta u Otonel cuentan con puntos de interés. Vamos a hablarte de los principales.

Castillo de Chirel

El gran símbolo de Cortes de Pallás es el castillo de Chirel, que se encuentra ubicado sobre una loma amesetada. Es un entorno agreste y de difícil acceso que habría facilitado su defensa pues, en su tiempo, marcaba la frontera entre la España cristiana y la musulmana. Se construyó en el siglo XIII, aunque fue reformado doscientos años más tarde.

Sería, justamente, la conquista cristiana y la posterior expulsión de los moriscos lo que provocaría la decadencia de esta fortificación, pues, con todo ello, dejó de tener sentido como bastión. Arquitectónicamente, posee planta rectangular y se accede a él mediante un paso elevado y un arco apuntado.

Asimismo, en dos de sus extremos presenta grandes torreones. Uno es de planta trapezoidal y varias alturas, mientras que el otro es cuadrado y conserva su bóveda de cañón. Completaba el conjunto la torre mayor, la doble muralla defensiva, el aljibe y numerosas saeteras y arpilleras. En definitiva, el castillo conserva elementos constructivos musulmanes, pero también otros posteriores de estilo gótico. Desde hace años está inscrito en el Inventario de Protección del Patrimonio Cultural Europeo.

Otras construcciones de interés en la villa

También destaca en la localidad valenciana la iglesia parroquial de Nuestra Señora de los Ángeles, construida a finales del siglo XVIII. Está en pleno eje central de la villa, rodeada por calles de trazado andalusí, y responde a los cánones del barroco, aunque su decoración interior es rococó.

En el exterior, destacan su fachada plana que culmina en un frontón curvo y su rosetón ovalado que alberga una imagen de Nuestra Señora de los Ángeles. También llamará tu atención la torre campanario que se halla en uno de sus extremos y cuenta con tres alturas. Por su parte, el interior se dispone en una sola nave en cuyo centro se alza una cúpula octogonal coronada por tejas de vidriadas. Por su parte, las pechinas que la sustentan están decoradas con pinturas de estilo académico alusivas a mujeres de la Biblia como Judith o Esther.

Esta iglesia fue costeada por la baronesa de Cortes de Pallás. Y, precisamente, el palacio donde vivía es otro de los monumentos destacados de la localidad. Se trata, asimismo, de una construcción del siglo XVIII y estilo barroco en la que destaca, entre otras cosas, el escudo heráldico de la familia.

Por otra parte, el castillo de Chirel no es el único que puedes ver en el término municipal de Cortes. En la citada aldea de Otonel tienes los restos de otro igualmente del siglo XIII. Su recinto era circular y constaba de murallas y torre. Probablemente, es más antiguo el castillo de la Pileta, que se encuentra a las afueras de Cortes. Presentaba mayores dimensiones que el anterior, pues tenía un perímetro de mil doscientos metros y constaba de murallas, tres torres y foso. Por último, el castillo de Ruaya tenía muros y torre mayor. Todos ellos están catalogados como bienes de interés cultural.

Festividades y gastronomía de Cortés de Pallas

Quizá prefieras visitar esta localidad valenciana cuando celebra sus fiestas patronales. Se celebran la segunda semana de agosto en honor a Nuestra Señora del Rosario. No obstante, también hay actos festivos por la Asunción, el Cristo de la Vida y San Isidro Labrador.

Justamente, para conmemorar las fiestas patronales se elabora pan bendito. Como sabrás, es un pan que se elabora, en general, con azúcar, anís, leche, pieles de naranja y limón, así como otros ingredientes. Y esto nos lleva a hablarte de la deliciosa gastronomía de Cortes de Pallás.

Podemos diferenciar en ella los platos de invierno y los de verano. El primero es frío y exige recetas más contundentes. En cambio, el segundo es caluroso y son más apetecibles los platos ligeros. En cuanto a las primeras, te aconsejamos que pruebes la olla de pueblo. Es un sabroso plato que lleva judías, nabicol (hortaliza que pertenece a la familia del repollo), patatas, cardo y distintos tipos de carne, sobre todo de cerdo.

También son deliciosas la gachamigas, una sencilla receta que se elabora con harina, sal agua, aceite de oliva y ajo. Con este último se prepara el ajoarriero, que, además, lleva patatas, huevo y aceite. Una suerte de variedad de las primeras es el mojete arrastrao, un puré de harina que se acompaña con diversos embutidos.

Por otro lado, en verano se toman bastante gazpacho y, como no podía ser menos si de Levante hablamos, distintas elaboraciones de arroz. Por ejemplo, con hierbas. Diferente es el trigo picado, que se come todo el año, aunque, por su contundencia, sería mejor para el invierno. Porque lleva garbanzos, verduras, varios productos cárnicos y trigo en vez de arroz. A este debe su nombre, ya que, además, se deja en remojo y se pica con un mortero con objeto de separar la piel y el grano. Finalmente, son típicas las tortas con distintos rellenos. Por ejemplo, de sardinas, pero también de chorizo o de longaniza.

¿Cómo llegar a Cortes de Pallás?

Hasta 1932 la localidad valenciana carecía de carretera. Su vía de comunicación era un camino que la unía con Macastre por una parte y con la carretera de Almansa a Requena por otra. Afortunadamente, hace ya tiempo que esto ha cambiado. Ahora hay buenas vías de comunicación que te llevarán hasta ella.

Si vienes en coche desde Valencia por la A-3, debes tomar la CV-425 para luego desviarte por la CV-424. No obstante, si eres un buen caminante, tienes la opción de coger el sendero de gran recorrido GR-7 antes de llegar a Cortes para hacerlo a pie. Entrarás por la preciosa Sierra Martés hasta el mismo centro del pueblo. Y, si vienes desde la parte opuesta, lo harás por un lateral de la Muela de Cortes.

En conclusión, te hemos mostrado todo lo que debes saber acerca de Cortes de Pallás. Como has visto, es un pequeño pueblo que tiene mucho que ofrecerte: una privilegiada naturaleza, interesantes monumentos y una deliciosa gastronomía. Anímate a conocerlo.