Pueblos bonitos de la Comunidad Valenciana

Encontrar pueblos bonitos de la Comunidad Valenciana es lo más fácil del mundo. En tierras levantinas se hallan algunas de las más espectaculares localidades de España y nada tienen que desmerecer, por ejemplo, de las que puedes encontrar en Madrid (aquí te dejamos un artículo sobre pueblos de la Comunidad de Madrid), en Aragón o en Galicia.

Tanto si prefieres la costa como si te inclinas por el interior, la Comunidad Valenciana tiene todo lo que necesitas. Maravillosas aldeas de montaña que parecen esculpidas en la roca y también pueblos del litoral que cuentan con playas de ensueño y coquetos puertos pesqueros. Todo ello por no mencionar el rico patrimonio monumental de aquellas tierras. Pero, sin más preámbulos, vamos a mostrarte cinco pueblos bonitos de la Comunidad Valenciana.

Cinco poblaciones espectaculares de la Comunidad Valenciana

Comenzaremos nuestro recorrido por el interior de la provincia de Castellón para visitar la histórica Morella. Seguiremos por la de Valencia y terminaremos en la de Alicante para mostrarte una de sus pequeñas joyas: Guadalest, declarada Conjunto Histórico Artístico e integrada en la asociación Los Pueblos Más Bonitos de España.

Morella

Morella

Las murallas de Morella

Como te decíamos, Morella está en el interior, al norte de la provincia castellonense, y rebosa historia por sus cuatro costados. De hecho, es una de las localidades más importantes de la comarca del Maestrazgo, que recibió este nombre por hallarse bajo la autoridad de grandes maestros de órdenes como las del Temple, de Montesa o de San Juan.

Una simple vista general de Morella es ya espectacular, con su imponente castillo dominando las casas que, rodeadas por la muralla medieval, parecen colgar de la enorme peña de la Mola en que se hallan. Esta enorme fortificación árabe del siglo XIII rodeada de murallas consta de edificios como el Palacio del Gobernador, el aljibe, distintos pabellones y las torres de la Pardalea y el Homenaje, entre otros. Por si ello fuera poco, en los alrededores del castillo se han descubierto yacimientos arqueológicos de época íbera, romana y visigoda. Concretamente, este último es uno de los más importantes de toda la zona mediterránea.

Pero no es ni mucho menos lo único que puedes visitar en Morella. Igual de imponente es la iglesia arciprestal de Santa María, una colosal edificación gótica que conserva sus vidrieras originales del siglo XIV. Entre las joyas que alberga en su interior, se hallan la escalera de caracol que accede al coro, el Altar Mayor, un órgano y una pintura de Sassoferrato.

Completan el patrimonio religioso de Morella las iglesias de San Juan, San Miguel y San Nicolás, el convento de San Francisco, la ermita de Santa Lucía y el santuario de la Virgen de Vallivana, ya a unos veinte kilómetros de la localidad.

Pero aún tienes más cosas que ver en ella. El acueducto de Santa Lucía es una magnífica obra de ingeniería hidráulica de estilo gótico, al que también pertenece el Ayuntamiento. Asimismo, cuenta con numerosas casas solariegas como la del cardenal Ram, la de la Cofradía de Labradores o la del marqués de Cruilles. Y, ya fuera de la villa, tienes la casa fortificada de los Brusca y Creixell. Finalmente, en las cuevas prehistóricas de Morella la Vella existen pinturas rupestres catalogadas como Patrimonio de la Humanidad.

Peñíscola, uno de los más bonitos pueblos de la Comunidad Valenciana

Peñíscola

El castillo de Peñíscola

Sin abandonar la castellonense comarca del Maestrazgo, pero ya al borde del mar, tienes la villa de Peñíscola, que nada tiene que envidiar a la anterior en cuanto a su monumentalidad y entorno natural privilegiado.

Respecto a este último, en su término municipal está incluida la Sierra de Irta, una de las más vírgenes de la Comunidad Valenciana. Acaba, justamente, en el mar formando espectaculares acantilados como el de Badum, donde se conservan los restos de una antigua torre de vigilancia.

Pero también tienes magníficas playas en Peñíscola.  Entre ellas, las urbanas Norte y Sur, la de las Viudas o la del Pebret. Por su parte, el famoso Bufador es una gran brecha entre las rocas marinas por la que, en días de temporal, surge el mar.

En cuanto a sus monumentos, el gran símbolo de la localidad es el castillo del Papa Luna, una construcción templaria que la domina desde un cerro. De estilo románico, fue edificado sobre una antigua alcazaba árabe y cuenta en su interior con una basílica. Asimismo, una de sus puertas, el portal Fosc, es actualmente una de las entradas de Peñíscola. Como anécdota, te diremos que el castillo ha servido de escenario a series y películas. Quizá la más famosa de las primeras sea Juego de Tronos.

También debes visitar en la villa castellonense la iglesia parroquial de Santa María, que combina el románico y el gótico y en la cual fue nombrado obispo Alonso de Borja, el futuro papa Calixto III. Y, junto a ella, las ermitas de San Antonio y de la Virgen de la Ermitana, así como el Museo del Mar, en el que puedes ver un recorrido por la tradición pesquera de Peñíscola desde la antigüedad.

Chulilla, un gran desconocido entre los pueblos valencianos más bonitos

Chulilla

Vista de Chulilla

Dejamos la provincia de Castellón para llegar a la de Valencia y mostrarte una de las maravillas ocultas de esta tierra. Te hablamos de la localidad de Chulilla, situada en la comarca de Los Serranos, a unos sesenta kilómetros de la capital.

La belleza de este pueblo de casas blancas y calles estrechas es espectacular. Se encuentra sobre un alto promontorio en cuya cima está el antiguo castillo árabe y que te ofrece unas vistas espectaculares. Pero, si bonita es la localidad, más aún lo son sus alrededores, con cañones de hasta cien metros de altitud sobre el río Turia y parajes como el Charco Azul, una laguna preciosa. Para conocerlos, te aconsejamos la llamada ruta de los Pantanos.

En la zona, concretamente en el barranco de Falfiguera, tienes incluso pinturas rupestres. Asimismo, te recomendamos visitar las ermitas de San Josepe y Santa Bárbara. Finalmente, volviendo al pueblo, debes visitar la iglesia de la Virgen de los Ángeles, construida en el siglo XV y que alberga tallas y pinturas del XVI y XVII.

Bocairente

Las cuevas de los Moros

Cuevas de los Moros en Bocairente

Más espectacular aún que la localidad anterior es Bocairente, también situada sobre un cerro en la vertiente noroeste de Sierra Mariola a casi setecientos metros de altura. Todo ello la hace perfecta para iniciar rutas de senderismo.

No obstante, el gran atractivo de Bocairente es su casco antiguo, declarado Conjunto Histórico Artístico. Buena parte de él está conformado por el barrio de La Villa, antiguo núcleo medieval lleno de calles estrechas y empinadas. En el centro histórico de la localidad puedes ver la iglesia de la Virgen de la Asunción, construida en el siglo XVI, aunque combina el gótico con el barroco.

Otros monumentos religiosos que puedes ver en Bocairente son las ermitas de San Juan, de la Virgen de Agosto y de la Virgen de los Desamparados. Pero más curioso es el monasterio rupestre, un antiguo convento subterráneo que contaba incluso con iglesia.

Sin embargo, quizá el símbolo de Bocairente sean las cuevas de los Moros. Son un conjunto de oquedades artificiales creadas en los siglos X y XI en una pared de casi trescientos metros de altura. No se sabe con certeza a qué se destinaban, pero la opinión más aceptada era que se trataba de graneros fortificados.

También de época islámica es la torre de Mariola, situada en el alto del mismo nombre y que, igualmente, tenía un papel defensivo. Puedes subir a ella y disfrutar de imponentes vistas. Finalmente, te aconsejamos que visites en Bocairente la plaza de toros, construida en 1843; el pozo de nieve de San Blas, utilizado como nevero desde el siglo XVII, y el edificio del Hotel L’Agora, que combina el estilo neomudéjar con el modernista valenciano.

Guadalest

Guadalest

Ayuntamiento de Guadalest

Por último, llegamos a la provincia de Alicante para mostrarte otro de los pueblos bonitos de la Comunidad Valenciana. Se halla, concretamente en la comarca de la Marina Baja, en un enclave espectacular entre las sierras de Aitana y Xortá. Y, como te decíamos, fue declarado Conjunto Histórico Artístico en 1974.

Ubicado a casi seiscientos metros de altura, su gran símbolo es el castillo de San José, una fortaleza árabe del siglo XI que domina todo el valle. No era el único de la localidad. También contaba con el castillo de la Alcozaiba, del que actualmente solo queda una torre en ruinas.

Por su parte, la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción fue construida en el siglo XVIII y es de estilo barroco. La antigua prisión del XII se encuentra en los bajos del Ayuntamiento y la Casa Orduña es un palacete nobiliario del XVII. En su interior, además de pinturas, puedes ver una interesante colección de cerámica.

Y esto nos lleva a hablarte de otra peculiaridad de Guadalest: sus museos. Cuenta casi con diez y algunos son tan curiosos como los dedicados a belenes y casas de muñecas, a instrumentos de tortura, a micro-miniaturas o a vehículos históricos.

En conclusión, te hemos mostrado cinco de los pueblos bonitos de la Comunidad Valenciana. Pero la tierra levantina cuenta con otros muchos. Por ejemplo, Altea, con sus calles estrechas enmarcadas por casas blancas; Játiva, con su imponente castillo; Villajoyosa, con sus peculiares casas pintadas (aquí tienes un artículo sobre Villajoyosa) o Sax, dominado por una espectacular fortaleza medieval. ¿No te apetece conocerlos?


Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

*