Sao Luis, mucho más que playas

El título de Sao Luis, mucho más que playas te dará una idea de lo que vamos a hablarte en este artículo. En efecto, trataremos sobre la ciudad brasileña de ese nombre que pertenece y es capital del estado de Maranhão. Porque, como sabrás, se encuentra en un entorno privilegiado.

Pero también posee un espectacular casco histórico, una artesanía rica y variada y fiestas populares que hunden sus raíces en el más primitivo folclore de la región. Por ejemplo, las llamadas Tambor de Crioula y Bumba-Meu-Boi. No en balde, la ciudad está catalogada como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. A continuación, vamos a mostrarte todo esto para que veas a Sao Luis como mucho más que playas.

Historia de Sao Luis

Esta ciudad brasileña se fundó en 1612 de la mano del francés Daniel de la Touche, señor de La Ravardière, como capital de la Francia Equinoccial. Recibía este nombre un conjunto de territorios que los galos poseían en la región americana próxima al Ecuador. Asimismo, en honor a su rey (Luis IX), le puso el nombre de Sao Luis.

Pero solo tres años más tarde pasó a manos de los portugueses y, después, a los neerlandeses, que solo la retuvieron otros tres años. Ya en 1860, la localidad vivió una época de esplendor gracias a la exportación de algodón a Estados Unidos, que entonces se hallaba en plena Guerra de Secesión. Entonces, se convirtió en la tercera ciudad de Brasil, solo por detrás de Río de Janeiro y de Salvador de Bahía.

Pero el algodón cayó en decadencia a finales de esa centuria y, desde entonces, Sao Luis ha buscado otras maneras de prosperar. Actualmente, tiene un gran atractivo turístico y cuenta con algo más de un millón de habitantes, además de ser, como te decíamos, la capital del estado de Maranhão.

A modo de anécdota curiosa, no nos resistimos a contarte el suceso de las hormigas, que está a medio camino entre la realidad y la leyenda, pero figura en el recuerdo de sus habitantes. En 1706 las hormigas que habitaban la ciudad fueron procesadas e incluso llevadas a juicio. Se las acusaba de haber robado la harina que los religiosos guardaban en los sótanos del seminario. También fueron encausadas por daños al patrimonio, ya que habían excavado túneles bajo la construcción.

Ubicación y cómo llegar

Para que comprendas mejor nuestra afirmación de Sao Luis, mucho más que playas, vamos a hablarte de su ubicación, rodeada de un impresionante entorno natural. Se encuentra en la isla de su mismo nombre, que se conoce popularmente como «la isla del Amor» y que se halla entre las preciosas bahías de Sao Marcos y Sao José de Ribamar, La separa de tierra continental el llamado Estrecho de los Mosquitos.

Además, la rodean otras islas que conforman un pequeño archipiélago. Entre ellas, las de Dos Hermanas, las Pombinhas, Guarapirá o del Miedo. Asimismo, buena parte de su término municipal está incluido dentro de parques naturales como los del Sitio del Rangedor y del Bacanga o de áreas protegidas como las del Itapiracó o de la Región del Maracaná.

En cuanto a la forma de llegar a Sao Luis, la mejor es el avión. La ciudad tiene un aeropuerto internacional al que arriban tanto vuelos nacionales como procedentes del extranjero. Desde él, tienes autobuses hasta el centro de la localidad y también para moverte por ella.

Por otra parte, no es una ciudad especialmente peligrosa. De hecho, se encuentra entre las diez más seguras de Brasil. No obstante, te recomendamos que tomes las habituales precauciones. Por ejemplo, no salir de noche por ciertos barrios o ir a otros en grupo por si acaso.

Finalmente, no es una localidad muy cara, aunque, quizá algo más que otras del país por su carácter turístico. No obstante, una habitación de hotel normal puede costarte en torno a sesenta o setenta euros, mientras que una comida ronda los diez reales. Como sabrás, esta es la moneda de Brasil y hoy equivale a 0,18 euros.

Por qué Sao Luis, mucho más que playas

Si hemos titulado este artículo Sao Luis, mucho más que playas, tenemos que hablarte por fuerza de estas. Puedes encontrarlas de todos los tamaños y casi todas son de arena blanca. Las más famosas son las urbanas que encontrarás entre la Avenida Litoranea y la península de Ponta D’Areia, donde está la mayoría de los hoteles. Entre ellas, tienes la de este último nombre; la de Sao Marcos, preferida por los más jóvenes y la de Calhau, que es una de las más famosas e ideal para actividades deportivas.

Por otro lado, a unos veinticinco kilómetros de la ciudad tienes la playa de la Raposa, que es perfecta para la pesca, y a unos treinta la de Sao José de Ribamar. Esta última localidad es famosa por sus fiestas de tipo religioso. Pero aún no te hemos explicado por qué decimos Sao Luis, mucho más que playas. Vamos a hacerlo.

Qué ver en Sao Luis

Esa afirmación no es gratuita. Como te hemos indicado, Sao Luis ha recibido la catalogación de Patrimonio de la Humanidad por parte de la Unesco. Buena culpa de ello la tiene su impresionante casco histórico, pero también su artesanía y su folclore tradicional.

Por si todo ello fuera poco, la ciudad también es conocida como «la Atenas brasileña» por la gran cantidad de poetas que nacieron en ella. Es el caso de Aluisio Azevedo, Graça Ananha, Coelho Neto o Gonçalves Días. Y, para culminarlo todo, se trata de la capital del reggae de Brasil, incluso cuenta con un museo dedicado a este tipo de música.

Casco histórico de Sao Luis

Cualquier visita a esta ciudad debe comenzar por su espectacular casco histórico. Lo conforman unas tres mil quinientas edificaciones que tienen tanto valor histórico como artístico. La gran mayoría se construyeron en el siglo XVII, cuando se fundó la localidad.

Entre las más espectaculares de las religiosas está la catedral de Nuestra Señora de la Victoria. Se trata de una construcción neoclásica en cuya fachada destacan dos grandes torres y un frontón central. Además, unido a ella está el palacio episcopal, que responde a las mismas características.

También forman parte del patrimonio religioso de Sao Luis las iglesias del Rosario, de los Remedios y del Destierro, así como los conventos del Carmen y de la Merced. También es interesante el Museo de Arte Sacro, donde puedes ver piezas barrocas, neoclásicas y rococós de los siglos XVIII, XIX y XX.

En cuanto a las edificaciones civiles del casco histórico, debes ver casas como las de las Minas, las Fuentes, las Piedras y Granero, junto al teatro Arthur Azevedo y palacios como el de La Ravardière y de los Leones. De este último te hablaremos más adelante, junto a las atracciones que te proponemos a continuación.

Casa do Maranhão

Es un museo de tipo folclórico que, como su propio nombre indica, está dedicado al patrimonio cultural del estado de Maranhão. También lo encontrarás en el casco histórico, concretamente, su sede es el edificio de la antigua aduana, construido en 1873.

Si lo visitas, conocerás hechos históricos como la propia fundación de Sao Luis y el proyecto de crear la ya citada Francia Equinoccial. Pero también verás todo tipo de piezas de artesanía, trajes e incluso costumbres gastronómicas de la zona. No obstante, quizá su espacio más interesante sea el dedicado al folclore. En este conocerás las principales manifestaciones de la región. Por ejemplo, las citadas celebraciones del Bumba-Meu-Boi y el Tambor de Crioula. Pero también las caixeiras de la fiesta del Espíritu Santo o el Tambor de Mina.

Mercado Central de Sao Luis

Claro que, si quieres comprar artesanía de Sao Luis, tienes que visitar el mercado central de la ciudad. También lo encontrarás en el casco histórico, junto a la bonita fuente das Pedras. Se remonta a mediados del siglo XIX, pero el edificio actual es de 1939.

Cuenta con unos cuatrocientos cincuenta puestos que no solo se dedican a la artesanía de la paja, el cuero o la madera. También los hay de comestibles, hierbas y plantas medicinales. E incluso de utensilios prácticos como los de menaje del hogar. Pero, sobre todo, si quieres palpar la vida cotidiana de la ciudad, tienes que visitar este mercado.

Compañía Circense del Teatro de Bonecos

El teatro de títeres presenta una gran tradición en Brasil, pues su existencia se remonta al siglo XVIII. En principio, llegó a Río de Janeiro, pero pronto se extendió al resto de su territorio. Además, se crearon modalidades propias, Por ejemplo, en el estado de Pernambuco se desarrolló una forma de títere conocida como mamulengo.

Por su parte, en Sao Luis tienes la Compañía Circense del Teatro de Bonecos, que ofrece espectáculos con estas figuras, al tiempo que te enseña su historia en la ciudad. Tiene su sede en la rúa dos Catraeiros, sin número.

Museo de Artes Visuales

Está ubicado en una preciosa casa del siglo XIX decorada con el típico azulejo portugués y con balcones de hierro forjado. Se creó en 1989 para albergar manifestaciones de artes plásticas realizadas por los principales artistas de Brasil, tanto actuales como más antiguos.

Entre ellos se encuentran figuras como Társila do Amaral, Alfredo Volpi, Miguel Veiga, Ademir Martins o Newton Sá. Asimismo, cuenta con salas dedicadas, justamente, a azulejos decorativos, vajillas y arte en vidrio. Pero dos de sus puntos fuertes son la galería Nagy Lajos y la biblioteca Assis Chateaubriant. La primera sala es un homenaje al artista húngaro que le da nombre y que creó una importante escuela en el estado de Maranhão. Por su parte, la segunda cuenta con más de seis mil ejemplares de libros de todas las disciplinas.

Palacio de los Leones

Esta preciosa construcción del siglo XVII y estilo clásico es la sede del Gobierno del estado de Maranhão. También lo encontrarás en pleno casco antiguo, concretamente, en lo alto del promontorio donde nació la ciudad. Debe su nombre a las figuras de leones que lo custodian.

Se encuentran ante la fachada, que destaca por combinar los citados rasgos clásicos con otros típicos de la arquitectura colonial. También destaca por sus grandes dimensiones y su magnífico estado de conservación, aunque ha sido restaurado varias veces.

En conclusión, como has podido ver, la afirmación Sao Luis, mucho más que playas es cierta. La capital del estado de Maranhão las tiene magníficas, pero también te ofrece un casco histórico y un tradición cultural y folclórica que le han permitido obtener el reconocimiento de Patrimonio de la Humanidad. Anímate a conocer esta preciosa ciudad de Brasil, no te arrepentirás.